No se quien puede ir a un concierto de este plasta,ni siquiera para encender el mechero que ya es gastar gas,imagino que los cubanos exiliados habrán pagado la entrada para permitirse el lujo de poder cagarse en él y en los hermanos Castro.
No se quien puede ir a un concierto de este plasta,ni siquiera para encender el mechero que ya es gastar gas,imagino que los cubanos exiliados habrán pagado la entrada para permitirse el lujo de poder cagarse en él y en los hermanos Castro.
Los cubanos de Miami tienen valor para defender la libertad ¡Ánimo!