Colabora

Carlos Dávila, Elena Valenciano y la fregona

Ya está liada. La prensa cuenta el mal despertar que tienen los sindicatos y el mal perder del PSOE. Están como fieras.

La Gaceta apunta directa y sin disimulo. "Los sindicatos y Rubalcaba convocan otra algarada para el aniversario del 11-M", que les traen muy buenos recuerdos. "La izquierda reedita la crispación contra el PP que desplegó tras los asesinatos de Atocha", ah, aquellas manifestaciones en Génova, aquellos ‘Aznar, asesino’, qué tiempos. En el editorial están que trinan. "Los socialistas, bajo la experta y sibilina batuta de Rubalcaba, están dispuestos a todo". Y es que "la izquierda en general y el PSOE en particular, movidos por una especie de rencor de clase", están "muy dolidos por la aplastante derrota en las urnas", están que muerden, diría yo. Así que, para consolarse van a "crear broncas callejeras". ¡Fiesta, fiesta! Carlos Dávila se fija en Elena Valenciano, que últimamente manda mucho. "Es un clon de Rubalcaba pero en abrupto, con menos matices que el invento español por excelencia: la fregona". Carlos, te va a caer la del pulpo, te lo digo yo.

La Razón, pues más o menos lo mismo. "Prende la llama del PSOE. Tras la campaña de agitación de Rubalcaba, los radicales incendian Barcelona". Y encima "se burlan de las víctimas y convocan un paro para el 11-M", que ya es mala idea. Dice La Razón que los "pretextos" para la juerga en la calle son de lo más "variado": reforma laboral, recortes en la educación, apoyo a los de Valencia por la lata de la calefacción, que no llueve nada... Pero claro, siempre tiene que haber un metepatas indiscreto al que en la excitación del fuego y las tortas se le escape el secretito. "¡Viva la cerveza y viva el sexo!". Y Rajoy preocupado dándole vueltas a la cabeza. Haber empezado por ahí, hombre, seguro que todavía quedan algunas pelillas sueltas para solucionar estas inquietudes.

ABC, pues lo mismo. "Desafío en la calle contra las urnas. La oposición responsable del PSOE". Esto último es una ironía, creo. En el editorial, el periódico de Vocento se pone pelma. Que si "los problemas de viabilidad de la universidad no son de los últimos meses", que si "el sistema universitario" está en quiebra "hace tiempo", que si "el Gobierno no es responsable". ¿Y? ¿Quién ha dicho que la Universidad tenga algo que ver? Bueno, sí los socialistas, pero hombre, nadie se lo ha creído. Jaime González se deja de memeces y va directo a la yugular. "Rubalcaba, en lugar de esperar pacientemente cuatro años en el Congreso de los Diputados a que llegue su turno, ataja por la calle de en medio con un lanzallamas en la mano". Pues eso.

En El Mundo ni pa ti ni pa mi, habla de "protesta estudiantil contra los recortes en educación". Lo que pasa, es que entre estos buenos chicos tan aplicados había otros angelitos "encapuchados", un "grupo radical que se aprovechó de la convocatoria para sembrar el caos y la violencia". Hay que irse dentro para encontrar la sombra de Rubalcaba. "El PSOE no piensa dejar la calle ni piensa amedrentarse por las acusaciones del PP". Dice Pedro J. que "la única respuesta a estas actuaciones es la firmeza policial. Las fuerzas de seguridad tienen la obligación de preservar el orden". Tururú, vas tú si quieres, dirán las fuerzas de seguridad, que luego cuando imponemos el orden vienen algunos y dicen que ejercemos la brutalidad policial.

En El País no hay ni rastro de PSOE ni Rubalcaba por ningún lado. Son "los estudiantes" quienes "encienden la mecha de la protesta". En la foto de portada se ve claramente. Ni fuego, ni encapuchados, unos jovencitos atemorizados en un rincón mientras la poli les arrea con la porra. Es "el hastío por los recortes" lo que ha sacado a la gente a la calle, dice. El hastío que ha llegado justito, justito con el Gobierno del PP puntual como un reloj suizo, porque con los recortes del PSOE nasti de plasti, oye. Pero claro, ahora "los estudiantes" la montan en la calle al reivindicativo grito de "dónde están, no se ven, los niñatos del PP". Pues yo seré muy retorcida pero a mí esto me suena a buscar camorra.

Y me vuelvo a asomar hoy a Público digital a vigilar a mis chicos. Respiro tranquila, nada ha cambiado. "Aznar anda crecido y se ha soltado el pelo", dicen. Y lo más importante. "Ni una palabra sobre su champú". Increíble. ¡No ha hablado de su champú! Lo de este expresidente es un escándalo.

Ver los comentarios Ocultar los comentarios

Portada

Suscríbete a nuestro boletín diario