Lo que no sabías de los probióticos: no todos actúan igual ni sirven para lo mismo

La salud digestiva es cada vez más importante tanto en España como en otros países de Europa y Occidente por eso, con la vista puesta en cuidar la salud, se han puesto de moda los probióticos. Aunque es cierto que habitualmente hay bastante confusión sobre qué son y cuáles son sus beneficios. Se trata de bacterias beneficiosas que se encuentran en el intestino y su principal función es restablecer el equilibrio de la microbiota intestinal. No hay que dejar de recordar que este equilibrio es esencial para prevenir problemas como el síndrome del intestino irritable y la inflamación abdominal.

Entonces, ¿qué es la microbiota y por qué es importante? La microbiota es el conjunto de microorganismos que habitan en el cuerpo humano y desempeñan funciones esenciales para la salud. Concretamente son billones de microbios: bacterias, virus, hongos, arqueas y protozoos, que viven en simbiosis con las células humanas. Estos microorganismos no solo facilitan la digestión, sino que también desempeñan un papel fundamental en el funcionamiento del sistema inmunológico y en la producción de vitaminas y neurotransmisores.

Probióticos: ¿qué son y cómo funcionan?

Los probióticos son microorganismos vivos que, en las cantidades adecuadas, son muy necesarios para mantener un sistema inmunológico fuerte y preparado. Se trata de unas bacterias beneficiosas que habitan en el intestino y mejoran la salud general del organismo, facilitando la absorción de nutrientes, estimulando la digestión y fortaleciendo las defensas.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que no todos los probióticos son iguales sino que cada uno de ellos presenta propiedades distintas que beneficiarán en distintas áreas de salud. Los probióticos se diferencian a través de las siguientes características: su género, su especie y su cepa. Para dar soporte al sistema digestivo, será importante tener en cuenta algunas de las siguientes cepas de probióticos:

• Bifidobacterium longum: ayuda a mantener la salud del tracto intestinal y el sistema inmunológico, así como también a proteger contra posibles infecciones. Además, se ha demostrado que mejora la función intestinal, tiene un efecto protector contra la diarrea y reduce los efectos secundarios del tratamiento con antibióticos, como la diarrea asociada con antibióticos. Incluso es reconocido por aliviar síntomas de ansiedad y estrés, lo cual se vincula con el eje intestino-cerebro.
• Bifidobacterium animalis spp Lactis: cepa probiótica altamente investigada y clínicamente probada para mejorar el estreñimiento. Se ha demostrado que alcanza el intestino vivo a través de cambios microbianos confirmados en las heces y la recuperación fecal. Esta cepa es conocida por mejorar la función intestinal y reducir el estreñimiento, así como por fortalecer el sistema inmunológico.
• Saccharomyces cerevisiae: inhibe el crecimiento de bacterias patógenas y también combate la diarrea asociada a los antibióticos. El Saccharomyces boulardii es un probiótico único, ya que es una levadura y no una bacteria. Esta característica lo hace resistente a los antibióticos, lo que le permite ser muy efectivo en la prevención de la diarrea asociada a tratamientos antibióticos y en el control de ciertos desórdenes gastrointestinales, como el síndrome del intestino irritable.
• Lactobacillus acidophilus: uno de los probióticos más reconocidos que ayuda a mantener un equilibrio adecuado de bacterias en el intestino. Además, es especialmente útil para reducir los síntomas de intolerancia a la lactosa y mejorar la digestión general.
• Lactobacillus rhamnosus: se adhiere fuertemente a las células epiteliales intestinales, lo que indica una capacidad de excluir patógenos del epitelio gastrointestinal. Además, ha exhibido un fuerte potencial para inhibir el crecimiento de varias bacterias patógenas. Es reconocido también por su capacidad para reducir la diarrea en niños y adultos, y por mejorar la salud digestiva general.

Beneficios de los probióticos

• Mejoran la digestión y la absorción de los nutrientes como vitamina B, calcio y hierro.
• Regulan el tránsito intestinal, reduciendo el estreñimiento, la diarrea y el síndrome del intestino irritable
• Refuerzan el sistema inmunitario y previenen enfermedades infecciosas
• Ayudan a reducir el colesterol y la presión arterial
• Alivian los síntomas de las alergias y del asma
• Combaten y previenen enfermedades intestinales como la colitis, el síndrome del intestino irritable o la enfermedad de Crohn.
• Ayudan a mejorar el estado de ánimo, dada la relación directa entre el equilibrio de la flora intestinal con una disminución de enfermedades como la ansiedad o la depresión.

Alimentos que son una fuente de probióticos

• Yogur: especialmente si contiene bífidus, pero en general el yogur ayuda a la digestión y reduce la hinchazón abdominal.
• Kéfir: esta bebida fermentada, con una textura parecida al yogur, contiene una cantidad significativamente mayor de probióticos.
• Chucrut: este alimento, popular en la cocina alemana, es col fermentada. Y es beneficioso ya que reduce gases y mejora la digestión, aunque debe comerse sin pasteurizar para preservar las bacterias buenas.
• Pepinillos en salmuera: este encurtido clásico es excelente para la microbiota. Es importante que no estén en vinagre, sino en salmuera, para mantener sus propiedades probióticas.
• Quesos: algunos tipos de quesos, como el brie, el camembert, el feta o el gorgonzola pueden contener niveles más altos de probióticos.
• Vinagre de manzana: sin pasteurizar.
• Cacao en polvo natural sin procesar o «no alcalinizado» o chocolate procesado con más del 85% de cacao.
• Tempeh: es un producto elaborado a base de granos de soja que se fermentan, dando como resultado un alto contenido en proteínas.
• Kimchi: este plato tradicional coreano no solo es rico en probióticos, sino que también aporta vitamina C, carotenos y calcio.
• Kombucha: esta bebida fermentada de té con fructosa ha ganado popularidad en España en los últimos años. Está disponible en varios sabores frutales y es una excelente fuente de probióticos.
• Natto: aunque es menos conocido en España, este producto japonés hecho de soja fermentada por la bacteria Bacillus subtilis es rico en probióticos, vitaminas y aminoácidos esenciales. Sin embargo, su fuerte olor y presentación pastosa pueden no ser del agrado de todos.