10 especias que deberías tener en tu cocina por sus potentes beneficios para la salud

La tradición de las especias se remonta al principio de la civilización y, además, fue una de las primeras sustancias con las que la humanidad empezó a exportar y negociar. Desde el inicio de los tiempos se entendieron además sus beneficios y se usaban con medicina no solamente para aportar sabor a los diferentes platos. Por ello, los nutricionistas las tienen muy presentes en sus recomendaciones. Entre otras cosas porque el condimentar con especias permite reducir la sal, otro ingrediente permanente y menos saludable. El motivo es que la sal contribuye a aumentar la tensión sanguínea y el riesgo cardiovascular, así que el mero hecho de sustituirla por especias ya supone una mejora en la salud.

Muchas especias contienen antioxidantes, minerales y vitaminas esenciales que pueden contribuir a una mejor salud general y prevenir diversas enfermedades. Además, pueden ser capaces de marcar la diferencia de sabor en cualquier plato al que se añadan. Sal, pimienta y, sobre todo, distintos tipos de hierbas y productos en polvo. Pero, algunas de esas especias que se utilizan para potencias olores y sabores deberían ser tenidas más en cuenta por otras de sus propiedades. De hecho, tanto es así que algunas de esas especias y condimentos tienen propiedades medicinales que suelen ser utilizadas para mejorar algunas dolencias o como parte de tratamientos terapéuticos.

¿De dónde provienen las especias?

Las especias naturales cuentan desde tiempos inmemoriales con una fama bien merecida de condimentos medicinales que fueron usados por las civilizaciones antiguas como la egipcia, la india y la china para sanar ciertas patologías y aliviar un sinfín de dolencias y trastornos. Debe quedar claro que, en aquellos tiempos el acceso a estas semillas, cortezas, y plantas era mucho más complicado y sólo las personas de las clases altas podían usarlas y no fue hasta el siglo XV con el descubrimiento de América cuando el comercio de estas especias se convirtió en una estrategia principal en Europa y su uso se popularizó. Quizá el único inconveniente que presentan algunos de estos condimentos en su vertiente medicinal resida en la cantidad que es necesario ingerir para notar sus resultados.

¿Cuáles son las principales características de las especias?

Las especias se extraen de las diferentes partes de las plantas: hojas, flores, tallos, cortezas y raíces y su uso principal es el de preservar o intensificar el sabor de los alimentos a los que se añaden en pequeñas dosis. Por ello, siempre es aconsejable sustituir el uso de los aditivos sintéticos y otros productos químicos por estos condimentos naturales que van a conseguir el mismo propósito sin contraindicaciones para el organismo. Las especias se convierten en grandes saborizantes a la hora de condimentar las comidas sin necesidad de poner en riesgo la salud cardiovascular.

Mejores especias para la salud

• Azafrán: Su exquisito sabor mejora cualquier receta y es el toque final ideal de la paella. No obstante, hay que destacar que no es una especia apta para todos los bolsillos. Pero vale la pena invertir en ella en lugar de algún capricho, porque con el azafrán también se invierte en salud ya que mejora la digestión, favorece la asimilación de nutrientes y evita los gases, es neuroprotectora, tiene efectos antidepresivos, modula algunas hormonas que actúan sobre el cerebro y es afrodisíaco. Pero no se queda ahí sino que la lista de beneficios es más amplia ya que también ayuda a proteger la vista, bajar el colesterol, aporta hierro y vitaminas, y algunos compuestos, como los flavonoides y betacarotenos, se consideran anticancerígenos.
• Cúrcuma: Conocida por su distintivo color amarillo-anaranjado, la cúrcuma es muy apreciada por sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, gracias a la curcumina, su principal componente activo. Se ha demostrado que ayuda a combatir la inflamación crónica, reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, y posiblemente incluso prevenir y tratar el cáncer y enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer. Además, la cúrcuma se conoce como el ibuprofeno natural. Pero no solo tiene esos beneficios, sino que mucho más ya que ayuda a la cicatrización de heridas, los síntomas de depresión, ayuda al hígado y la Organización Mundial de la Salud lo recomienda para tratar dispepsias (problemas gástricos).
• Jengibre: Esta raíz picante es famosa por sus efectos beneficiosos sobre el sistema digestivo. El jengibre puede aliviar náuseas, ayudar a combatir el mareo y promover la digestión saludable. Además, tiene propiedades antiinflamatorias y se ha utilizado para tratar dolores musculares y artritis. No hay que olvidar tampoco que el jengibre es una de las especias más potentes para la lucha contra los patógenos e infecciones. Es un potente aliado del sistema inmune, y también favorece la memoria y la concentración. Habitual en la medicina tradicional asiática y en la dieta alimenticia del extremo oriente, está comprobado que su consumo ayuda con los problemas digestivos. Tomado en polvo o en infusión, ayuda a regular los niveles de azúcar en sangre, contribuye a la absorción de grasas y es aliada si se quiere perder peso, mejora los dolores típicos del síndrome menstrual e incluso es aliada de la lucha contra bacterias resistentes al más potente de los antibióticos. Sus efectos también se extienden al cerebro pues el sistema nervioso y la microbiota están conectados.
• Pimienta: Seguramente la especia más popular en España también aporta beneficios a la salud. Su principal secreto es la piperina, una sustancia que le da el característico sabor picante. Destaca como potente antiinflamatorio y analgésico ya que actúa sobre el dolor.
• Canela: La canela puede mejorar la sensibilidad a la insulina y ayudar a bajar los niveles de azúcar en sangre, lo que la hace especialmente valiosa para personas con diabetes tipo 2. También posee propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Además, la canela es perfecta para la lucha contra los patógenos, ayuda a combatir la halitosis, es aliada en enfermedades relacionadas con la insulina y el páncreas, controlando los niveles de glucosa en sangre; y además, es un potente antioxidante.
  Pero, además de todo es estimulante y afrodisíaca, mejora las digestiones, reduce la acidez y las flatulencias, aporta calor y energía a nuestro organismo, puede mejorar, a la larga, las enfermedades articulares y óseas, abre el apetito, es un anticoagulante natural y reduce los niveles de colesterol y el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.
• Cardamomo: El cardamomo es conocido por sus propiedades digestivas, capaces de aliviar problemas como la indigestión y la flatulencia. Además, se ha encontrado que tiene efectos positivos en la reducción de la presión arterial. El cardamomo es una especie aromática conocida por ser la reina de la lucha contra la halitosis y ser un aliado en contra de todo tipo de bacterias y problemas orales o de salivación. También es un aliado para los problemas digestivos, ya que ayuda en el proceso de digestión, evitando los gases o los dolores de estómago, si se toma tanto en las comidas en forma de condimento o después de comer, como en infusión. No solo eso, también es un antiséptico natural, siendo una gran aliada en la lucha contra todo tipo de infecciones, de hecho, se indica como tratamiento natural contra la tos y otros trastornos respiratorios, como el asma, tomada como infusión.
• Pimentón: Es conocido por sus propiedades como analgésico natural y obtenido de ciertas variedades de pimientos rojos, el pimentón es un ingrediente fundamental en la cocina española, sin embargo, pocos conocen sus propiedades como especia medicinal. El pimentón es un rico antioxidante gracias a uno de sus componentes, el licopeno, aporta vitaminas y minerales esenciales (A,B,C,E, selenio y hierro), estimula la circulación, controla los niveles de colesterol y facilita la digestión.
• Clavo: Proceden de Indonesia, y son muy utilizados en diversos platos de la cocina asiática. Al igual que otras especias, también se le ha dado uso mas allá de la cocina, sirviendo como ingrediente para la medicina tradicional, ya que es un potente antiséptico. Los clavos mejoran la digestión, acaban con todo tipo de parásito intestinal, ayudan a regular los niveles de azúcar en sangre, combaten la diabetes y reducen la inflamación. Además, el clavo es muy rico en eugenol, utilizado desde hace mucho tiempo en la práctica odontológica por sus propiedades medicinales. Posee efectos calmantes para aquellos con problemas bucales, como las aftas, el dolor de caries o muelas, alivia las náuseas, combate los problemas cardiovasculares y aporta nutrientes esenciales para el cuerpo como son el manganeso, magnesio, vitaminas (K,V), potasio, calcio y ácidos grasos omega-3. Usado tópicamente, puede ayudar a combatir las infecciones bacterianas en los pies.
• Comino: Esta planta, de origen mediterráneo, da una de las especias probablemente más utilizadas en Europa. Es un aliado potente para mejorar la digestión, estimula la producción de enzimas pancreáticas, regulando la glucosa y evita el deterioro de las proteínas en el cuerpo. Además, puede ser de gran ayuda para quienes sufren habitualmente de gases y flatulencias. A pesar de que tiene un sabor muy característico que no gusta a todo el mundo, resulta muy práctico incorporarlo en aquellos platos que cuesta digerir, como las coles o las legumbres. También tiene propiedades que podrían tener un efecto beneficioso en los siguientes problemas de salud: enfermedades respiratorias, anemia (ideal durante el embarazo, la lactancia y durante la menstruación) o problemas de piel.
• Nuez Moscada: originaria de Indonesia, es una planta cuyo fruto se obtiene de un grano duro cubierto de una membrana. Ese grano es el que tanto se usa en cocina, y que aporta múltiples beneficios para la salud. Se utiliza para tratar problemas digestivos como la diarrea, la acidez y los gases, es un excelente calmante para los nervios, ayudando como ninguno a aquellos con problemas de insomnio, llegando incluso a utilizarse para tratar trastornos como la depresión o la ansiedad. Además tiene propiedades antibacterianas.
• Chile o ají picante: Según algunas hipótesis, el chile es una especia cardioprotectora, debido a sus contenidos de capsaicina , la sustancia que le da ese sabor picante. Esta sustancia previene y controla el colesterol alto que se acumula en las arterias y que genera hipertensión y otros problemas cardiovasculares.