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Esto es lo que sucede al comer limón a diario

Los limones son una gran fuente de vitamina C y otros nutrientes y son versátiles. Lo peor es su acidez. ¿Es malo para la salud comerlos a diario?

El limón ayuda al sistema inmunológico y la salud en general | Alamy

Los limones son una fruta ácida que provienen de los limoneros. Se trata de un cítrico que tiene una gran cantidad de nutrientes y minerales para la salud. Es versátil y puede utilizarse como aderezo de ensaladas, en guisos y en postres. No obstante, acerca de los limones existen muchos mitos y falsedades sobre sus efectos en el organismo, pero, es uno de los alimentos que más valor nutricional aporta.

Hay que recordar que es habitual tomar zumo de limón en forma de deliciosa limonada, además, también está presente en aliños y en numerosas preparaciones alimentarias que forman parte de la dieta mediterránea. Incluso hay muchas personas que deciden cada mañana al despertar tomar un vaso de agua con limón, normalmente con la idea de perder grasa. Cabe destacar que el limón es principalmente agua, pero en su composición destaca la presencia de vitaminas, minerales y otros nutrientes que le convierten en un alimento saludable.

De hecho, el limón es una fruta cítrica ampliamente conocida por su sabor refrescante y su alto contenido de vitamina C. Consumir limón a diario puede ser beneficioso para la salud en muchas formas, pero como con cualquier alimento, es importante hacerlo con moderación y tener en cuenta ciertos factores. Hay que destacar que el limón es rico en vitaminas B y C, así como en potasio, calcio, hierro, magnesio y fibra. Tiene un alto contenido en antioxidantes y es diurético, así que ayuda a limpiar la sangre y a eliminar la retención de líquidos. A esto hay que sumar que fortalece el sistema inmune y regula el pH. Ahora bien, del mismo modo que ocurre con el resto de alimentos, consumir limón en exceso no es una buena idea.

Propiedades del limón

El fruto del limonero, originario de Asia, es ya un alimento cultivado y consumido en todo el mundo, disponible prácticamente durante todo el año. No hay que olvidar que el limón es una fruta de escaso aporte calórico y baja en grasas, ya que 100 gramos de limón suponen solo 44 kcal. y la ingesta de 0,4 gramos de grasas totales.

No obstante, en su composición destacan la fibra soluble y micronutrientes, siendo los principales: la vitamina C, la vitamina A y algunas del grupo B, entre ellas la B6. Además, también es destacable la presencia de minerales como el calcio, el magnesio, el hierro, el fósforo, el selenio, el sodio y ante todo el potasio. Además, el limón guarda en su pulpa otros importantes nutrientes como algunos ácidos orgánicos beneficiosos. Entre ellos, el málico y el cítrico, así como fitonutrientes (limonoides) que se localizan principalmente en la cáscara y en las hebras blancas características del interior del fruto. Todos estos elementos son los que hacen del limón un saludable "cóctel" de vitaminas, minerales y ácidos que le dotan de importantes propiedades, como por ejemplo:

Beneficios del consumo de limón

Posibles efectos secundarios del consumo de limón

Sin embargo, hay que tener en cuenta que el ácido cítrico presente en los limones puede ser perjudicial para el esmalte dental si se consume en exceso. El motivo es que el contacto frecuente de los ácidos cítricos con los dientes puede erosionar el esmalte y aumentar el riesgo de caries. Por ello, para minimizar este riesgo, se recomienda enjuagarse la boca con agua después de consumir limón y esperar al menos 30 minutos antes de cepillarse los dientes.

Otra consideración es que el alto contenido de ácido cítrico en el limón puede ser problemático para personas con reflujo ácido o acidez estomacal crónica. En estos casos, el consumo excesivo de limón puede agravar los síntomas y causar molestias digestivas. Es evidente que la ingesta de limón debe ser moderada, porque aunque el zumo del fruto es alcalino, en un primer momento podría causar irritación en las paredes del aparato digestivo.

Además, el limón es altamente ácido y puede causar irritaciones en la piel. Los síntomas comunes incluyen sequedad excesiva, enrojecimiento y descamación de la piel. Incluso, ante problemas que implican un anormal y excesivo flujo de orina y posible deshidratación, por ejemplo, ante un episodio de cistitis, el limón, al igual que otros alimentos diuréticos, podría no resultar, en principio, aconsejable.

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