
En agosto las altas temperaturas del verano comienzan a suavizarse, lo que favorece la germinación y el crecimiento de muchas hortalizas antes del otoño. Además, el suelo todavía mantiene el calor, clave para el desarrollo de las raíces. En esta época del año también se mantiene la humedad gracias a las lluvias de final de verano. Por ello, es una gran idea sembrar a lo largo de este mes, ya que se puede aprovechar la transición del verano al invierno para obtener cosechas frescas y evitar heladas tempranas.
Qué cultivar en agosto y cómo hacerlo
- Col: se siembra en semillero cuando el calor comienza a remitir —a finales de agosto—. Es vital que tenga suelos ricos, frescos y bien drenados para que crezca. Se debe regar con regularidad, pero sin llegar a encharcar la tierra. Lo ideal es trasplantar cuando las plantas tengan entre 4 y 5 hojas. Es importante vigilar que no haya plagas, sobre todo de orugas y pulgones.
- Escarola: se puede sembrar en semillero o directamente en el suelo si el clima es suave. Esta especie requiere de riego frecuente, sobre todo al inicio, y suelos húmedos pero no encharcados, ya que podrían pudrirse las raíces. Se recomienda trasplantar una vez haya crecido la planta.
- Espinaca: suele crecer rápido en climas frescos, pero no soporta suelos muy secos ni la exposición solar directa en verano, es decir, no toleran bien el calor intenso. Por ello, es mejor esperar a finales de mes para plantarla. No requiere de grandes cuidados. Se puede sembrar directamente sobre la tierra o en semillero y el riego debe ser frecuente y ligero para mantener la humedad.
- Judías Verdes: se suele sembrar directamente en la tierra y en zonas cálidas, ya que necesitan al menos 60 días sin heladas. Entre los cuidados básicos destaca el riego constante y abundante, especialmente en floración. Esta planta necesita sol directo para poder crecer y un sustrato suelto. El momento ideal para sembrar es a principios de mes.
Cultivos aptos durante gran parte del año
Existen varias hortalizas que se adaptan bien a distintos climas y estaciones, lo que las convierte en cultivos ideales para sembrar en casi cualquier época del año, incluso en agosto. Entre las más destacadas se encuentran las siguientes cinco variedades:
- Lechuga: se puede sembrar en semillero o directamente en tierra con buen drenaje. Requiere riegos frecuentes pero ligeros, evitando encharcamientos que puedan estropear la raíz. Esta especie crece mejor entre sol y sombra si se cultiva en una zona muy calurosa. Se recomienda trasplantar una vez se haya desarrollado un poco, en otras palabras, cuando tiene al menos 4 hojas. Se debe tener especial cuidado con las plagas de babosas y caracoles, ya que es uno de sus alimentos favoritos.
- Zanahoria: esta especie se suele sembrar directamente en el suelo, y para ello, se debe hacer un surco profundo en la tierra. Es importante mantener la humedad del sustrato hasta su germinación —suele tardar entre 7 y 15 días —. También es fundamental evitar suelos compactos, ya que dificultan el crecimiento.
- Cebolla: se siembra en semillero y se trasplanta cuando alcanza unos 15 cm de altura. Entre los cuidados esenciales destaca el riego moderado y constante. Las cebollas necesitan estar expuestas a la luz solar directa. También es vital que el suelo sea fértil y esté bien aireado. Asimismo, eliminar malas hierbas es clave para su desarrollo. Se cosecha cuando el follaje se seca y cae.
- Acelga: se adapta con facilidad y resiste bien el calor si tiene suficiente agua. Se puede sembrar directamente en el suelo o en semillero y trasplantar a los 20–30 días. Necesita riego frecuente, sobre todo en los climas cálidos. Esta especie se puede cultivar casi todo el año en zonas templadas.
- Rábano: se siembra directamente en el suelo y necesita suelos sueltos y con buen drenaje para poder desarrollarse. También es fundamental el riego frecuente y ligero para evitar que se endurezca o se vuelva picante. Su ciclo es muy corto, de 20 a 30 días, por lo que permite varias cosechas al año. Ideal para sembrar incluso en agosto si se ubica en semisombra.
Hierbas aromáticas
- Albahaca: suele crecer mejor en zonas con temperaturas cálidas y sol directo, por eso agosto es el mes ideal para sembrar, antes de que bajen las temperaturas. El riego debe ser regular, pero hay que tener cuidado con los encharcamientos, ya que pueden generar hongos. Se puede sembrar directamente en el suelo, pero en caso de hacerlo en semillero, se debe trasplantar cuando la planta tenga al menos 4 hojas.
- Cilantro: se siembra directamente en tierra ligera y fértil. El riego debe ser frecuente, pero sin llegar a encharcar el sustrato. Agosto es el mejor mes para que germine con rapidez antes de que baje la temperatura, ya que no tolera mucho frío. Es importante no dejar que se espigue para prolongar la cosecha.
- Eneldo: lo ideal es sembrar directamente en un suelo fértil, con un buen drenaje y en un lugar soleado. Requiere riego moderado y no soporta encharcamientos. Este mes es el momento ideal para sembrar para asegurar un buen desarrollo antes del otoño, ya que es sumamente frágil ante las heladas y el frío.
- Estragón: aunque se puede propagar por esquejes, la siembra en semillero debe hacerse en agosto para aprovechar el calor. Esta especie necesita suelos bien drenados y estar expuesta al sol o semisombra. El riego debe ser regular pero sin exceso. Es una planta delicada en las primeras etapas, por lo que el clima cálido de agosto ayuda a su crecimiento.
Plantas para decorar
Las flores suelen dividirse en dos grupos. Por un lado, las que se siembran a principios de agosto —más resistentes al calor y de rápido crecimiento —. Entre ellas destacan: la caléndula, la zinna, el cosmos y el girasol. Por otro lado, las que se siembran a finales de agosto. Las plantas más comunes de esta temporada son: la viola, el alhelí, la nomeolvides, y la margarita de los prados.



