
L D (EFE) Rosselló ha pedido a todos los padres y madres que sustituyan la bollería que comen sus hijos en desayunos y meriendas por bocadillos de jamón porque son más saludables, y ha atajado los tópicos de que el jamón engorda y tiene colesterol. "Yo recomiendo comer jamón unas tres veces a la semana como mínimo en dietas de adelgazamiento, y el jamón bien curado es una carne magra, sin grasa", ha señalado la doctora, que ha valorado las cualidades nutritivas que tiene el jamón en edades adultas y, sobre todo, durante la infancia.
Según María Josep Rosselló, el jamón serrano contiene hierro del tipo hemo, el de más fácil absorción en el organismo por su biodisponibilidad, en comparación con el hierro de origen vegetal, que el organismo digiere con más dificultad. Apoyándose en un estudio clínico de la School Of Public Health de Harvard, Rosselló defiende que la aportación de hierro que supone el consumo de jamón podría reducir el riesgo de infertilidad ovulatoria en las mujeres.
"Algo muy interesante si tenemos en cuenta que cada vez la maternidad se retrasa a una edad más tardía y son las mujeres mayores las que presentan normalmente más déficit de hierro", ha resaltado la especialista en nutrición, que considera que en general "la sociedad no come correctamente ya que hay obesidad y desnutrición a la vez".
La doctora recomienda incluir en la dieta alimentos ricos en hierro como el jamón serrano, que en 100 gramos contiene el 18% de los 10 miligramos de hierro diarios recomendados para un adulto. "La falta de hierro influye incluso en el comportamiento de los niños", ha señalado la profesora de la Universidad Ramón Llull.
Por otra parte, la nutricionista ha subrayado el riesgo de anemia en los menores, ya que "una dieta deficiente en hierro durante la infancia causa retraso en el desarrollo cognoscitivo que perdura en la etapa adolescente". Entre las propiedades nutritivas del jamón también figura que es rico en fósforo y potasio.
Según María Josep Rosselló, el jamón serrano contiene hierro del tipo hemo, el de más fácil absorción en el organismo por su biodisponibilidad, en comparación con el hierro de origen vegetal, que el organismo digiere con más dificultad. Apoyándose en un estudio clínico de la School Of Public Health de Harvard, Rosselló defiende que la aportación de hierro que supone el consumo de jamón podría reducir el riesgo de infertilidad ovulatoria en las mujeres.
"Algo muy interesante si tenemos en cuenta que cada vez la maternidad se retrasa a una edad más tardía y son las mujeres mayores las que presentan normalmente más déficit de hierro", ha resaltado la especialista en nutrición, que considera que en general "la sociedad no come correctamente ya que hay obesidad y desnutrición a la vez".
La doctora recomienda incluir en la dieta alimentos ricos en hierro como el jamón serrano, que en 100 gramos contiene el 18% de los 10 miligramos de hierro diarios recomendados para un adulto. "La falta de hierro influye incluso en el comportamiento de los niños", ha señalado la profesora de la Universidad Ramón Llull.
Por otra parte, la nutricionista ha subrayado el riesgo de anemia en los menores, ya que "una dieta deficiente en hierro durante la infancia causa retraso en el desarrollo cognoscitivo que perdura en la etapa adolescente". Entre las propiedades nutritivas del jamón también figura que es rico en fósforo y potasio.
Por su parte, José Ramón Godoy, gerente de la Fundación Jamón Serrano, que agrupa a 133 productores de jamón de 13 comunidades, ha informado de que algunas empresas españolas han empezado a recibir autorizaciones para exportar jamones a Estados Unidos "pese a que allí la tradición alimentaria se inclina más hacia las hamburguesas".
