Menú

Sinde, sobre Delibes: "Era uno de los autores de cabecera de Zapatero"

Los autores de cabecera se le acumulan a Zapatero. Tras confesar el presidente su predilección por Gamoneda, Sinde –dando connotaciones políticas a la muerte de Delibes– ha destacado que el escritor era uno de los preferidos de Zapatero: "Tienen la misma comunidad autónoma de origen".

Los autores de cabecera se le acumulan a Zapatero. Tras confesar el presidente su predilección por Gamoneda, Sinde –dando connotaciones políticas a la muerte de Delibes– ha destacado que el escritor era uno de los preferidos de Zapatero: "Tienen la misma comunidad autónoma de origen".

La ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, destacó además que Delibes era uno de los "autores de referencia, de cabecera" de José Luis Rodríguez Zapatero, “mucho más tratándose de un castellano-leonés. Tiene la misma comunidad autónoma de origen del presidente”, al tiempo que puso de relieve la "importancia" que tiene el escritor en "todos los ministros", quienes "antes de ministros han sido lectores". Sin embargo, Miguel Delibes fue a lo largo de su vida un escritor y periodista independiente.

González-Sinde definió este viernes al escritor Miguel Delibes como un autor con capacidad para "quitar lo que sobra, para contar mucho con poco" en una trayectoria que ha sido "un terreno muy fértil para otros creadores". González-Sinde, en declaraciones a Efe antes de desplazarse a Valladolid, ciudad natal del escritor, destacó del autor de Cinco horas con Mario o El camino su "economía del lenguaje y la precisión en la descripción y en la elección de los personajes o de las situaciones".

"Es algo que al menos como escritora creo que es un gran valor", reconoció Sinde. La ministra de Cultura reflexionó asimismo sobre la relación de Delibes con el lector. Su legado literario supone "una huella muy honda no sólo en nuestra cultura, sino en cada uno de los lectores. Se cuentan por miles, por millones, las personas que hemos leído alguna de las obras de Delibes".

"No sólo manejaba el lenguaje con maestría sino que le importaba mucho llegar al lector y comunicar. Siempre tenía ese respeto y delante de su máquina de escribir estaba muy presente el lector, el destinatario", explicó.

Según González-Sinde, el autor de El hereje lograba con su obra "esa función de la literatura como vía de comunicación, de pensamiento y de expresión, asequible dentro de sus propias reglas y su habilidad como creador. Es una habilidad muy difícil de conseguir. Él tenía no sólo el don, sino la tenacidad, la cultura y la inteligencia", añadió.

Su calidad de "analista magnífico y creador inmejorable" quedó plasmada, según González-Sinde, también en su labor periodística. "Su trabajo en redacciones durante tantos años en el Norte de Castilla" simbolizaba "su constatación día a día de la realidad".

"Los temas, los asuntos, los conceptos que a él le preocupaban, como la tensión de la vida rural y su desaparición, la vida en la ciudad, así como los conflictos morales y humanos que él trataba son de plena vigencia. Son de una modernidad apabullante", consideró.

Testigo presencial de la Historia del siglo XX de España, Delibes "pertenece a esa generación que fueron adolescentes durante la Guerra Civil. Les marcó muy profundamente, les hizo tener una visión del ser humano y de España, un conocimiento mucho más profundo y adoptar unas posiciones morales y éticas muy reflexivas y muy hondas".

Pero su vínculo profundo con la realidad de su país le hizo no sólo "profundamente español, sino profundamente universal. Lamento que no haya dado tiempo a que Miguel Delibes no haya tenido un Premio Nobel porque era el más firme candidato en lengua española para mí", aseguró la ministra.

Miguel Delibes sí recibió a lo largo de su carrera galardones como el premio Cervantes en 1993, el premio Nacional de las Letras, el Premio Príncipe de Asturias, el Nacional de Narrativa y el premio de la Crítica. Sin embargo, el escritor demostró a lo largo de su carrera poca afición por los reconocimientos.

"En el aspecto humano creo que era muy remarcable que en una sociedad que paulatinamente se fue convirtiendo en una sociedad del espectáculo tuvo una moral muy rigurosa, muy profunda en la que siempre rehuía los premios, los honores y mantenía esa disciplina muy importante de saber cuál es su lugar".

Temas

En Sociedad

    0
    comentarios
    Acceda a los 39 comentarios guardados