L D (EFE) El primer ministro, Tony Blair, confirmó la puesta en marcha de la Agencia contra el Crimen Organizado Grave.
El ministro del Interior, David Blunkett, explicó que el cuerpo resultará de la fusión de las actuales Escuadra Nacional contra el Crimen, Servicio Nacional de Inteligencia Criminal y departamentos de investigación de los servicios de Aduanas e Inmigración. La Agencia operará bajo la jurisdicción de Inglaterra y Gales -Escocia e Irlanda del Norte tienen sus propias Policías-, aunque, en el curso de sus investigaciones, podrá actuar en todo el país.
La nueva policía permitirá aunar esfuerzos y coordinar recursos, subrayó el Gobierno, que adelantó que en breve se anunciarán otras medidas contra el crimen organizado. La creación de esta agencia, que entrará en vigor en 2006, supone la mayor reestructuración de la Policía británica desde 1964, cuando se diseñaron las 43 áreas de actuación actuales, que operan de forma independiente.
El nuevo cuerpo, financiado por el Gobierno, empleará cerca de 5.000 trabajadores, dijo el ministro. Según detalló Blunkett, la Agencia podrá efectuar sus propias detenciones, pero también compartirá información con las policías locales, que deberán presentar cargos contra los sospechosos. Trabajarán para ella investigadores civiles como contables, expertos en informática y financieros.
