LD (EFE) La actividad de la única fábrica que Benetton tenía en España cesó en enero pasado y ahora está a la espera de vender el edificio que aún posee en la localidad de Castellbisbal.
El cierre de esta factoría, que empleaba a medio centenar de operarios, fue pactado con los sindicatos en noviembre de 2003 y se inscribe en la estrategia de reubicar la producción de forma preferente en el Este de Europa.
Según los planes de la firma textil italiana, el objetivo es que en los próximos años sólo un 20 por ciento de sus productos se fabriquen en Italia. Croacia y Hungría son los países que más se beneficiarán de esta medida, que también se hará extensiva en una "pequeña" parte al norte de África, en concreto a Túnez.
Para compensar esta medida, el portavoz de Benetton precisó que la compañía tiene previsto potenciar su actividad comercial en España con la apertura de nuevos negocios minoristas, que conllevarán la creación de entre 50 y 80 puestos de trabajo anuales entre 2004 y 2006. Benetton ya se deshizo hace dos años de otra factoría que tenía en España en la localidad de Cervera, en la provincia catalana de Lérida, y que fue adquirida por una empresa local, Confecciones Butsenit, con la que trabajaba como proveedor.
Según los planes de la firma textil italiana, el objetivo es que en los próximos años sólo un 20 por ciento de sus productos se fabriquen en Italia. Croacia y Hungría son los países que más se beneficiarán de esta medida, que también se hará extensiva en una "pequeña" parte al norte de África, en concreto a Túnez.
Para compensar esta medida, el portavoz de Benetton precisó que la compañía tiene previsto potenciar su actividad comercial en España con la apertura de nuevos negocios minoristas, que conllevarán la creación de entre 50 y 80 puestos de trabajo anuales entre 2004 y 2006. Benetton ya se deshizo hace dos años de otra factoría que tenía en España en la localidad de Cervera, en la provincia catalana de Lérida, y que fue adquirida por una empresa local, Confecciones Butsenit, con la que trabajaba como proveedor.
Su filial española, que englobaba una fábrica situada en la localidad portuguesa de Maia, cerró 2003 con unos beneficios de 7 millones de euros y una facturación de 48 millones, lo que supuso, en ambos casos, un descenso del 25 por ciento respecto al año precedente.
Globalmente, el grupo textil italiano, que tiene negocios en otros sectores como el de las Autopistas –donde es socio de la española Abertis–, obtuvo en el último ejercicio unas ganancias de 108 millones de euros. En el primer trimestre de 2004 logró 28 millones de beneficios. El valor patrimonial neto de la compañía a 31 de marzo de este año se elevaba a 1.204 millones de euros (1.444,8 millones de dólares).
Globalmente, el grupo textil italiano, que tiene negocios en otros sectores como el de las Autopistas –donde es socio de la española Abertis–, obtuvo en el último ejercicio unas ganancias de 108 millones de euros. En el primer trimestre de 2004 logró 28 millones de beneficios. El valor patrimonial neto de la compañía a 31 de marzo de este año se elevaba a 1.204 millones de euros (1.444,8 millones de dólares).