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'El País' monta en cólera contra Rajoy por no a ir a la guerra con Francia

La polémica de los debates se cuela en la actualidad, todavía muy centrada en los atentados de París.

La polémica de los debates se cuela en la actualidad, todavía muy centrada en los atentados de París.
Mariano Rajoy. | EFE

El Mundo dice que "Rajoy quiere pactar con los partidos antes de dar ayuda a Hollande". Que "el presidente consultará incluso con Podemos las condiciones de la colaboración militar con el gobierno galo", que "descarta relevar a Francia en Mali y busca una foto de unidad nacional que desactive el efecto Azores". Vamos, que tiene más miedo que vergüenza y sufre pesadillas con los noalaguerra cercando otra vez las sedes del PP. No es para menos. Victoria Prego también comprende el acojone de Rajoy, Francia que se olvide. "Nosotros sabemos que somos un país escaldado por lo que ocurrió aquí". ¿Y que ocurrió? Pues que "tras el 11-M, los partidos políticos"- de izquierda, para ser más exactos- "acusaron al Gobierno de ser el responsable y llamaron asesino al presidente José María Aznar". Igualito que en Francia. "Por eso no tiene nada de raro que el presidente se tiente mucho la ropa antes de ordenar una mayor implicación del Ejército en el conflicto de Siria". Menudo regalito les haría a los podemitas y a los noalaguerra. Así que Francia tendrá que esperar. "España, de momento, no le puede dar lo que pide con tanta y tan comprensible cólera como urgencia". No saben cómo las gasta nuestra izquierda.

El editorial abronca a Rajoy por no aceptar debates a cuatro. "Solo de error se puede calificar la decisión de Rajoy de no participar en un debate a cuatro" pero "aún está a tiempo de rectificar". "La imagen temerosa que ofrecerá con su ausencia del debate posiblemente le pasará factura electoral", pronostica. En cuanto a dónde hacer los debates, les "parece lógico que se encarguen de celebrarlos organizaciones neutrales cuya señal pueda ser emitida por cualquier medio que lo desee para llegar al mayor número de ciudadanos posible. Lo que carece de sentido es que cada medio pretenda organizar su propio debate a cuatro", dice arreándole un par de leches a El País. Claro, que el debate que critica que no haya aceptado Rajoy es en La Sexta y Antena3.

"El apoyo militar de Alemania a Francia deja en evidencia Rajoy" dice El País con ese fervor guerrero que le tiene en un sinvivir. Y nuevo editorialazo. "Falta de seriedad", se titula hoy. Mientras el mundo entero habla del terrorismo, "Mariano Rajoy se ocupaba ayer de comentar los partidos de la Champions. No hay mucho más que decir sobre la falta de seriedad mostrada por el presidente candidato", le atiza. "Su ministro de Exteriores, José Manuel García Margallo, se permite decir que El País no va a fijar la estrategia del gobierno español, nada más lejos de nuestra intención", dice. Bueeeeno, sobre eso habría mucho que hablar. "Lo que no tiene pase es aplazar la respuesta a un problema de seguridad por causa de las elecciones. Lo mismo que pretender que la ciudadanía vote sin saber cuál es la posición de los candidatos respecto a un asunto tan sensible". Qué prisas tiene Prisa. Tanto empeño están poniendo en que Rajoy envíe tropas que ya se rumorea por Madrid que El País busca que el presidente dé un pasito para luego lanzarle a los noalaguerra a cercar la Moncloa y llamarle asesino. Rajoy, mientras, se resiste como un gato panza arriba.

ABC abre con el Papa. "El Papa, en África: el terrorismo nace de la pobreza". No lo dirá por Ben Laden, el multimillonaro saudí. Este santo hombre dice unas tonterías... Isabel San Sebastián cree que Rajoy acierta al no ir los debates. "La cruda realidad es que el candidato Rajoy no tiene nada que ganar en ese debate y sí mucho que perder, a poco que cometa un error. Por eso rechaza la invitación, consciente de que en España se castiga más duramente una metedura de pata que la falta de coraje necesario para dar la cara". Pero para Ignacio Camacho peor es lo de tener a los candidatos hasta en la sopa. "Atacan a traición, colándose en la intimidad de los hogares emboscados en cualquier apacible programa de entretenimiento con el que las familias pretenden echar un rato de evasión tras la cena". Pones el programa del día y ¡zas!, ahí está otra vez Rivera, que ayer estaba en el otro. O Pablo, al que acababa de eludir mediante la táctica del zapping. "No está claro que tanta ubicuidad mediática, tanto empeño forzado por aparentar una normalidad de atrezzo mal disimulado proporcione réditos electorales en vez de multiplicar el cansancio de la opinión pública ante la omnipresencia de los candidatos". Sí, se están pasando de rosca.

La Razón dice que "Francia pedirá a España refuerzo logístico pero no el relevo en Mali". Nos mandarían a Dakar y Libreville. No parecen sitios muy peligrosos pero no creo que eso logre aplacar las ansias de sangre de los noalaguerra. A Marhuenda se le nota emparanoiado con Rivera. Le dedica El Submarino. "Ni Ignacio Aguado ni ningún otro miembro de Ciudadanos de la Asamblea de Madrid asistieron a una conferencia de Albert Rivera en el Palace (…) ¿Simple casualidad o algo más? Los gestos son en ocasiones más verosímiles que las palabras", dice. Preocupada, está la peña. En un breve ya se pasa de frenada y coloca a Rivera en la "ultraizquierda", nada más y nada menos, por sustituir a uno del PP al frente de la Federación de Municipios de Madrid por un socialista. "Ni Pedro Sánchez ni Albert Rivera deben estar orgullosos del acuerdo. Su alianza de poder con la extrema izquierda les retrata". A Rivera el pobre tan pronto le ponen de falangista como de Che Guevara. Últimamente le dan por todos lados. Alguno incluso se pasa de la raya. Y no es Marhuenda.

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