
La decisión de Pohl podría obligar al Pentágono a adoptar la única medida que en este punto podría suspender el proceso, que es retirar los cargos, según el diario.
Con esta medida el juez pone en peligro los planes de la administración de Barack Obama de suspender todos los procesos contra prisioneros del centro de detención de la base de Guantánamo durante cuatro meses, con la que pretende ganar tiempo para elaborar los planes de cierre de esa prisión.
En su campaña electoral, Obama prometió que cerraría la cárcel de Guantánamo y ahora su Gobierno busca los mecanismos legales para poner punto final a los procesos en los que no hay cargos verificables, y procesar al resto bajo otra jurisdicción legal.
Tan solo horas después de tomar posesión en el cargo, Obama instruyó a su secretario de Defensa, Robert Gates, para que pidiera a los jueces militares en Guantánamo la suspensión durante 120 días de los procesos contra los 250 presos que permanecen en esa cárcel. Poco después un par de jueces suspendieron algunos juicios pendientes y se dictó la orden para el cierre de la cárcel en un plazo de un año.
