Dejemos quebrantos
y zapatrastadas,
callemos putadas,
horrores y espantos;
huyamos de llantos
en este periodo
de dificultad.
¡A pesar de todo,
feliz Navidad!
Dejemos de lado
torpezas de jueces,
zapatimemeces
de disco rayado,
y un reino manchado
de sórdido lodo
y asquerosidad...
¡A pesar de todo,
feliz Navidad!
Dejemos aparte
desgracias y estragos,
manejos aciagos
con odio y sin arte,
que Zeta reparte,
según es su modo:
con frivolidad.
¡A pesar de todo,
feliz Navidad!
Dejemos tensiones,
dejemos tristezas
dejemos crudezas
y absurdas cuestiones
con estos mamones
de mal acomodo
en la dignidad...
¡A pesar de todo,
feliz Navidad!
Dejemos cabreo,
dejemos enfado:
más pullas no añado,
que sé que está feo.
Tan sólo os deseo
(si no os incomodo
aquí en Libertad),
a pesar de todo,
¡Feliz Navidad!