Triple violación y la cara desfigurada, las atrocidades de un inmigrante ilegal magrebí detenido en Tenerife

Una mujer de 60 años fue asaltada el pasado 4 de enero, a primera hora de la mañana, cuando se disponía a entrar en su lugar de trabajo, en el Edificio Olympo de Santa Cruz Tenerife. Su agresor la atacó por la espalda. La introdujo a empujones en el inmueble, donde "la violó oral, vaginal y analmente" y "le desfiguró la cara", confirman fuentes policiales a LD.

Un día más tarde, un inmigrante marroquí de 26 años fue detenido por estos hechos. El joven, en situación irregular, había llegado a Canarias apenas unos días antes de -presuntamente- cometer la atroz agresión. "LLevaba pocos días, llegó en patera a Lanzarote el 31 de diciembre", nos aseguran.

El varón se encontraba en la capital tinerfeña porque había sido trasladado al centro de acogida de inmigrantes Las Raíces, en La Laguna, el 3 de enero. Es decir, un día antes de la triple violación que -según las pesquisas policiales- habría cometido tan sólo unas horas después de llegar a la ciudad portuaria, sin llegar a mediar palabra con su presunta víctima.

El ataque fue sin contemplaciones, "brutal". Así lo califican las fuentes consultadas, que prefieren no dar más detalles sobre la gravedad de los hechos, que "se siguen investigando". Lo que sí sabemos es que "la mujer agredida tuvo que ser ingresada" y que permaneció en el hospital "varios días".

Centro Las Raíces

Hechos como este ponen en cuestión la gestión que se realiza en los centros de acogida como Las Raíces, muy polémico desde su apertura por distintos motivos. Lo puso en marcha el Gobierno de Pedro Sánchez en el marco del Plan Canarias, aprobado en noviembre de 2020 "para abordar el incremento de llegadas a costas a las islas".

Sin embargo, se ha convertido más en un problema que en una solución. Ahora, ante la reducción del número de inmigrantes que llegan al archipiélago, el Ejecutivo ha iniciado el repliegue del plan de emergencia. Pero, en el camino, han quedado graves episodios difíciles de olvidar para los isleños.

En particular el de Las Raíces es conocido por las trifulcas y reyertas que se han registrado en su interior. Y los ciudadanos de Tenerife denuncian los problemas de seguridad ciudadana que genera la falta de control del movimiento de los irregulares, que campan a sus anchas por la isla.

Se han quejado incluso los propios inmigrantes, que han llegado a manifestarse para reclamar condiciones de vida dignas. Las raíces terminó siendo un macrocampamento con más que evidentes carencias de salubridad y en el que tenían que hacer colas de varias horas para recibir algo de comida.