
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife ha aprobado las bases que regularán las autorizaciones administrativas para las empresas de alquiler de patinetes eléctricos que se implanten en el municipio, las cuales serán únicamente dos y ha impuesto un máximo de 1.292 dispositivos por las calles. El objetivo de estas medidas es "garantizar que ofrezcan un servicio de calidad a los usuarios, así como evitar problemas de sobreexplotación o explotación incorrecta del dominio público o posibles molestias a los ciudadanos", así lo detalla el alcalde, José Manuel Bermúdez.
Desde hace meses, en el Ayuntamiento están empeñados en reglar el uso de este tipo de vehículo de movilidad personal (VMP), cada vez más presentes en todas las ciudades europeas, y argumentan que dicha regulación es fundamental para garantizar las condiciones de accesibilidad en la vía pública y la seguridad para peatones y usuarios.
Las bases aprobadas regirán el derecho a la utilización del suelo de dominio público para el estacionamiento y la ubicación de los patinetes eléctricos en las calles de Tenerife. Además, se detallan las condiciones en que las dos empresas deben ejercer su actividad en el período de vigencia de la autorización, que será de un año, con posibilidades de prorrogarse hasta cuatro años.
La actividad será distribuida por distritos, que tendrá en Anaga nueve plazas de aparcamiento para 48 patinetes; Centro-Ifara, 63 plazas y 448 patinetes; en Ofra-Cista Sur, 43 plazas y 172 vehículos; En Salud-La Salle, 67 y 392, y en el Suroeste 58 plazas y 232 VMP.
El Ayuntamiento fija en dos el número máximo de empresas susceptibles de autorización, las cuales recaudará de cada una 20.000 euros, según lo establece en la ordenanza fiscal reguladora de la tasa para la utilización privativa o el aprovechamiento especial de los bienes de dominio público municipal. Además, las empresas deberán depositar 50 euros a modo de garantía por cada uno de los patinetes.
Entre las medidas reguladoras, también se recoge la obligatoriedad de que la empresa autorizada tenga contratada una póliza de seguro que cubra todos los posibles daños que pudieran derivarse del uso de los patinetes tanto para los usuarios como para los viandantes y los bienes públicos y privados.

El seguro tendrá una cobertura mínima de 300.000 euros, y como indica el Ayuntamiento, la empresa autorizada deberá retirar aquellos vehículos mal aparcados en un plazo máximo de 24 horas desde que se haya producido su incorrecto estacionamiento fuera de las zonas indicadas para ello.
Con todo esto, y una vez publicadas las bases, las empresas autorizadas tendrán 20 días para presentar sus propuestas. Entre ellas se valorará especialmente aquellas que ofrezcan soluciones tecnológicas tanto para asegurar que los patinetes son depositados en las plazas de estacionamiento, como para que los usuarios no circulen por zonas prohibidas ni por las aceras.
Todas estas medidas son indispensables para garantizar una buena convivencia entre peatones y conductores en general, no solo de VMP, pues la proliferación en las calles de este tipo de vehículos ha sido en varias ocaciones motivo de accidentes, no solo por el mal uso que algunos usuarios hacen de ello durante la conducción, también por el "abandono" de los mismos en cualquier sitio, dificultando el paso.
