Tras varios años de relación y meses de preparativos, la ganadora de Gran Hermano 14, Susana Molina y el veterinario Guille del Valle se dieron el "sí, quiero" este viernes 13 de junio en Madrid, rodeados de amigos, familiares y muchas caras conocidas del mundo influencer. La celebración tuvo lugar en una finca a las afueras de la capital.
Una boda de verano, con más de 200 invitados, donde no faltaron los nombres habituales del panorama digital. Entre los asistentes se pudo ver a Dulceida y Alba, Madame de Rosa, Anabel Pantoja, Nagore Robles y Clara Flila, entre muchos otros. También llamó la atención la presencia de Mario Casas y Melyssa Pinto, protagonistas involuntarios de una de las anécdotas más comentadas del día.
Un vestido transformable y sin luna de miel
La novia confió en la diseñadora Beatriz Claro y su firma Claro Couture para lucir un vestido que guardaba una sorpresa: era transformable. Durante el banquete, Susana dejó atrás la falda larga de ceremonia para dar paso a un look más cómodo, aunque igual de elegante, pensado para disfrutar del baile y la fiesta.
Aunque muchos esperaban que los recién casados pusieran rumbo a algún destino exótico, Susana ha asegurado que, por ahora, no hay luna de miel prevista. Prefiere pasar el verano cerca de sus amigos, y no descarta una escapada más adelante, quizá en enero.
Prohibido llorar… y nada de niños
Una de las decisiones más comentadas por parte de los novios fue la de prohibir los discursos emotivos y los vídeos sorpresa. Nada de powerpoints, ni textos largos: la pareja quería evitar llantos innecesarios y centrarse en disfrutar de la fiesta. "Queremos pasarlo bien, no emocionarnos demasiado", comentaba ella días antes.
También optaron por una boda solo para adultos: ningún niño entre los invitados, para asegurar un ambiente relajado y sin interrupciones.
La aparición de Mario Casas
Melyssa Pinto ha acaparado los titulares de la prensa estas últimas semanas debido a su relación sentimental con Mario Casas y hoy ha reaparecido ante las cámaras a su llegada al enlace matrimonial entre Susana Molina y Guille del Valle... pero, ¿ha acudido sola?
La respuesta es sí. Pero porque el actor ha sido el encargado de llevarla hasta la finca donde se ha celebrado la boda y cuando ha visto a las cámaras de la prensa ha echado marcha atrás para no pararse en mitad de la entrada.
Sí, lo cierto es que han pensado poco la estrategia ya que teniendo en cuenta que se casa uno de los rostros más conocidos en redes sociales y que entre los invitados hay gente con relevancia social, Mario y Melyssa no han caído en que sería un enlace retransmitido en directo.
Charli Montoya, uno de los invitados
El hermano del que fue pareja de Susana durante siete años, estuvo presente en la boda compartiendo el día más importante de su excuñada, con la que mantiene una excelente relación.
"Un pequeño detalle para Susana y Guille desde el corazón", ha escrito en su cuenta de Instagram. Un pañuelo con los nombres de los novios, la fecha del ‘sí, quiero’ rodeado de una simbología que claramente representa su vínculo con los protagonistas del día. Perros, una flamenca, una moto, una copa de vino y la Giralda de Sevilla.
La pareja eligió casarse justo el mismo día en que se conocieron, un 13 de junio, cinco años atrás.