El alarmante suceso tuvo lugar el pasado 13 de octubre en el castillo de Windsor, cuando dos individuos encapuchados irrumpieron en la propiedad. Lo más inquietante es que, a pocos metros de allí, el príncipe Guillermo, Kate Middleton y sus tres hijos, George, Charlotte y Louis descansaban en su residencia habitual, Adelaide Cottage, dentro del mismo complejo de Windsor.
El rey Carlos III, quien se encontraba en Escocia durante la noche del robo, y la reina Camilla, que estaba en la India, no se han visto directamente afectados. Según ha informado el diario británico The Sun, los intrusos lograron acceder tras escalar una valla de dos metros y utilizar un camión para derribar una verja de seguridad, causando daños materiales y llevándose un quad y una camioneta de la finca Shaw Farm.
Detalles del incidente
Los ladrones, tras conseguir entrar, se dirigieron a un granero donde sustrajeron los vehículos antes de darse a la fuga. De acuerdo con el portavoz de la Policía de Thames Valley, el robo fue denunciado alrededor de las 23:45 horas del domingo 13 de octubre. "No se han producido detenciones hasta ahora, pero las investigaciones están en curso", indicó.
Las informaciones apuntan a que las alarmas no se activaron hasta que la barrera de seguridad de la granja fue derribada, lo que ha generado inquietud sobre la seguridad del castillo, especialmente después de la retirada de agentes armados de varios de los accesos.
Ahora, los oficiales solo patrullan la zona durante las ceremonias del cambio de guardia, mientras que los terrenos del castillo son vigilados por patrullas.
Antecedentes de seguridad en Windsor
El castillo de Windsor ha sido escenario de otros eventos preocupantes. En diciembre de 2021, un hombre armado con una ballesta logró entrar al recinto con la intención de atentar contra la vida de la reina Isabel II, quien pasaba allí las festividades navideñas. Ese individuo cumple actualmente una pena de nueve años de prisión.