
La boda de Brooklyn Beckham y la actriz Nicola Peltz tuvo lugar el pasado sábado en Florida, una celebración que comenzó un día antes de la propia ceremonia y en la que se dejó ver lo más granado del famoseo deportivo y del mundo del espectáculo. La fiesta costó alrededor de 3 millones de euros y no se privaron de nada, incluido un fuerte dispositivo de seguridad que no consiguió ahuyentar a algunos paparazzis.
Un día después de la fiesta, los novios salieron a estrenar el regalo que David y Victoria Beckham le hicieron a su hijo: un Jaguar XK120 eléctrico estilo clásico descapotable valorado en medio millón de euros. La pareja dio una vuelta por Palm Beach (Florida), lugar donde tuvo lugar la ceremonia, y llegó al almuerzo del domingo poco antes de que salieran a la luz las primeras imágenes del multitudinario evento.
On tomorrow's front page: Brooklyn Beckham takes his bride for a ride in a classic car today - in their first sighting as newlyweds. https://t.co/qZKZW43ZZ4 pic.twitter.com/QcIhKrYk1s
— The Sun (@TheSun) April 10, 2022
El exfutbolista del Real Madrid es inversor de Lunaz, una empresa que se encarga de restaurar coches antiguos. En este caso, David escogió reparar este modelo del año 1954 y convertirlo en eléctrico, para lo que han necesitado miles de horas de trabajo de un equipo de 120 artesanos, diseñadores y técnicos de la compañía, según avanza el diario británico Daily Mail.

"Este es el Vehículo Eléctrico Reciclado (UEV) Jaguar XK140 de Lunaz. Estamos muy orgullosos de recuperar los coches más célebres y hermosos de la historia a través de la electrificación y la restauración", comentó la empresa sobre la reparación del coche escogido por Beckham.
La pareja ha publicado en Instagram varias fotos de la boda en las que se les ve enamorados y sonrientes. Se trata de unas imágenes que ha compartido la edición británica de Vogue en su perfil y que muestran un adelanto del reportaje especial que prepara la revista. Así hemos podido ver el vestido de Valentino que lució la novia (aunque se cambió en varias ocasiones), detalles desconocidos como los vestidos de las invitadas, o los momentos más emocionantes de una boda de cuento de hadas.


