El rey Juan Carlos I aterrizó este miércoles en Vigo casi un año después de su última visita a España en mayo de 2022, cuando precisamente también visitó la ciudad para luego partir hacia la localidad pontevedresa de Sangenjo, al igual que hará en esta ocasión.
La estancia del emérito en Galicia parece que va a estar marcada por la discreción, después del malestar que causó en el Gobierno su anterior estancia en Sangenjo y su negativa a dar explicaciones por su comportamiento personal tras las irregularidades fiscales que cometió en los últimos años de su reinado y tras la abdicación.
No obstante y pese a esta relativa discreción en la segunda visita, el monarca emérito podría estar dibujando unos planes de futuro en España que molestarían sobremanera a Felipe VI y Casa Real.
Según Cuatro al Día, Juan Carlos podría estar pensando en adquirir una vivienda propia en Sangenjo para, así, "liberar" a su amigo Pedro Campos de la responsabilidad de acogerle y de paso poder hacer muchos más viajes a nuestro país.
Juan Carlos, según el programa de Mediaset, estaría buscando una vivienda mucho más privada para que no llamar la atención y evitar la concentración de periodistas en torno a la casa de su amigo Pedro Campos.
Debido a estos requerimientos de privacidad y el previsible lujo, el Rey podría estar buscando un Pazo gallego o bien una finca apartada, con preferencia hacia la primera opción. La compra, en todo caso, se realizaría de forma totalmente se