
Algo tiene Carmen Cervera con sus memorias, que ninguna editorial ni ningún escritor consigue publicarlas. La última ha sido la prestigiosa periodista Nieves Herrero, que tenía ya redactado en su totalidad un amplio libro basado en las andanzas de Tita. De manera sorpredente, sobre todo para ella, el proyecto se ha paralizado.
En declaraciones a Es La Mañana de Federico, Nieves Herrero reconoce su sorpresa. De hecho la achaca a algún malentendido cuyo origen desconoce. "En realidad ni la editorial ni yo sabemos nada", confesaba este martes. "Yo he hecho mi trabajo y es lo único que puedo decir, tiene que deberse a algún malentendido". Un malentendido que tira por tierra seiscientas páginas y un año entero de trabajo, que, en una autora tan concienzuda como Nieves, seguramente hah sido muy intenso.
El grupo editorial, Penguin Random House, ha explicado que manifiestan su apoyo a la autora, con quien trabajan en total sintonía desde hace años.
Sin embargo no es la primera vez que la baronesa decide cancelar, a última hora y sin explicación, la publicación de sus memorias. Incluso con la excusa de que quiere redactarlas ella de su puño y letra.
En 2019, la Editorial La Esfera de los Libros también recibió el encargo de preparar la biografía de Tita. Como suele ocurrir en este tipo de trabajos, un escritor se encargaría de "transcribir" y llevar al papel las vivencias de Carmen. Lo que otrora se conocía como "negro literario". Cerrado el acuerdo, Tita decidió que no quería seguir adelante con el libro.
Es reincidente
La reacción de Carmen Cervera con sus biografías y con los autores que han intentado escribirlas es, cuanto menos, sorprendente. Las experiencias de la baronesa con todos aquellos que han intentado novelar su vida no han sido positivas.
Entre los muchos autores a los que se les ha encargado la redacción del texto figura Julia Escobar, que hace dos décadas decidió el encargo del la editora Carmen Balcells (agente literaria de, entre otros Gabriel García Márquez o Neruda), de plasmar la vida de su marido el barón. El esfuerzo fue tan arduo como infructuoso y la escritora, autora de la novela Nadie dijo que fuera fácil (Editorial Edhasa), acabó escaldada con todo este asunto.
Antes lo habían intentado José Luis de Vilallonga, el guionista Juan Felipe Vila-Sanjuán o y el periodista italiano Fabrizio Graziani. Todos ellos acabaron desistiendo debido a numerosas injerencias de Tita.
