Los millones que ha ganado Penélope Cruz tras sus modestos orígenes

A sus cuarenta y nueve años cumplidos el pasado 28 de abril Penélope Cruz sigue asombrando por su belleza y elegancia cuando desfila: la última vez al comienzo de mayo en el Museo Metropolitan de Nueva York, durante la Met Gala en homenaje a Karl Lagerfeld, donde nuestra compatriota fue la estrella del evento en el que tomaron parte otras destacadas estrellas, entre cantantes, actrices y modelos internacionales. Penélope era muy amiga del mencionado diseñador y en esta ocasión salió vestida de novia, con un vestido de Chanel. Las revistas de modas y del corazón le han dedicado varias páginas y alabanzas por su gran estilo.

Son treinta años los que Penélope Cruz lleva dedicada al cine, al margen de sus compromisos como modelo. Y nunca ha olvidado sus modestos orígenes, nacida en el hogar de un mecánico extremeño que trabajaba en una empresa concesionaria de coches y una madre peluquera, vecinos de la localidad madrileña de Alcobendas. Tal vez ese oficio hubiera sido el de Penélope, pero sus progenitores comprendieron los sueños de la jovencita que quería ser actriz y no la desengañaron. Cuando la adolescente vio ¡Átame! en un cine, quedó deslumbrada. El destino le iba a deparar ser una de las protagonistas más asidua de Pedro Almodóvar con quien, hasta la fecha, ha rodado ya ocho películas.

Pero antes de que Penélope se colocara ante una cámara cinematográfica, fue elegida entre dos centenares de aspirantes en unas pruebas para intervenir en un videoclip musical, de una canción del entonces muy de moda grupo Mecano, La fuerza del destino. Con uno de sus componentes, el muy imaginativo Nacho Cano, tuvo su primer gran amor, entre 1991 y 1996. Quedaron muy amigos no obstante terminada aquella romántica y apasionada relación. Las que tendría después Penélope lo fueron con varios galanes de la pantalla. Para el recuerdo de los dos están otros dos vídeos de Nacho con ella en todas las imágenes filmadas en 1994 y 1995.

Sus siguientes amores fueron, el primero con Javier Bardem, cuando Bigas Luna, el director de Jamón, jamón, los emparejó en 1992. El romance, más o menos fugaz, concluyó, sin imaginar ambos que un día serían marido y mujer. En esa década, Penélope Cruz fue haciéndose un nombre importante en el cine español. Alejandro Amenábar la dirigió en Abre los ojos, donde los espectadores pudieron contemplar los espléndidos pechos de ella. Quien desde luego, a lo largo de su carrera, no ha tenido que mostrar siempre su cuerpo al desnudo para triunfar. Era una promesa, tuvo que pasar un tiempo para ir adaptándose a su profesión, de igual modo que de alumna en una academia de danza, adolescente, aprendió la técnica y disciplina del baile clásico. Con rudimentarios conocimientos de inglés dio el salto a Hollywood hacia el año 2000. Y una vez ya familiarizada con el idioma sajón, a base de estudio y tenacidad, asimismo pudo rodar películas en francés e italiano, y en esta última experiencia la llegaron a comparar con una nueva Sofía Loren. Porque aparte de su fotogenia, su belleza, Penélope tiene gran fuerza interpretativa, una de las virtudes de la estrella napolitana.

Ya instalada en Los Ángeles, sus papeles en el cine fueron ascendiendo en importancia. Y si al principio en Todos los caballos bellos le encomendaron un papel inferior de nativa, lo clásico para las aspirantes hispanas, donde por cierto intimó con el protagonista, Matt Damon, llegaría a ser considerada una estrella ya asumible del cine norteamericano. Con algunos de los más atractivos galanes mantuvo sonados idilios, fuera de los rodajes. El principal, con Tom Cruise, su pareja en Vanilla Sky, que era un "remake" del antes citado filme Abre los ojos. Su amor lo mantuvieron a lo largo de tres años de convivencia, viajaron incluso a Madrid donde Penélope le presentó a sus padres. Todo parecía indicar que escucharían campanas de boda… lo que no sucedió. Puede que Cruise, más bajito que ella, la aburriera con su obsesión por la Cienciologia, la secta religiosa que patrocina.

Otro compañero coprotagonista con ella en La mandolina del capitán Corelli, Nicolas Cage, se enamoró de Penélope una temporada, mientras iban promocionando su película. Lo mismo que le sucedió junto a Matthew McConaughey, guapo y altísimo, que le hizo tilín unos meses, mientras rodaban Sáhara. Pero quien al final ganó, digamos para siempre, fue su antiguo noviete, Javier Bardem, que también se había largado desde Madrid en busca de un futuro más prometedor en Hollywood, y a fuer que lo consiguió. Estuvieron tres años saliendo y entrando para darse el sí ante un juez en 2010. Celebraron la ceremonia nupcial en la isla privada del actor Johnny Deep que tenía en las Bahamas, vistiendo ella un espectacular vestido de John Galiano. Con Depp, Penélope participó en la película Blow. Y Javier también se hizo muy amigo de él. Ya por entonces, Pe, como es llamada en los Estados Unidos recortando su nombre y Javier, llevaban su relación con la mayor intimidad posible y no quisieron que en la boda hubiera fotógrafos. Si algunas imágenes existen, serán de algún invitado de confianza.

Tuvieron dos hijos: Leo, nacido en 2011, y la niña, Luna, en 2013. Bien nos parece que los protejan de cara a la persecución de los "paparazzi". Aunque luego se muestran excesivamente, sobre todo Bardem, enemistados con los fotógrafos, insistiendo que su vida privada les pertenece. Están en su derecho. Pero podría Javier tomar nota del comportamiento de su colega Antonio Banderas con los periodistas. Penélope es menos radical, entre otras razones porque estando contratada para lanzamientos publicitarios de importantes firmas de la moda y la cosmética (Lancôme, L´Oreal, Ralph Lauren, Dior, entre otras) cuando asiste a presentaciones de cada una de ellas, aun no admitiendo preguntas sobre su intimidad, procura comportarse con la mayor simpatía en las ruedas de prensa.

Penélope Cruz es la primera española que ha ganado un Óscar a la mejor actriz de reparto, en 2009, por su trabajo en Vicky Cristina Barcelona, que dirigió Woody Allen, y una nominación en 2022 por su papel protagonista en Madres paralelas, de Almodóvar. Fue asimismo nominada en un par de ocasiones más. A Javier Bardem se le ha reconocido su talento y también ganó un Óscar en 2007 por No es país para viejos. Cuando asimismo lo premiaron como mejor actor en el Festival de Cannes, se dirigió a Penélope, presente en la sala, con estas palabras: "A mi amiga, mi compañera, mi amor… Penélope, te debo muchas cosas y te quiero mucho". Por el rostro de la madrileña surcaron lágrimas en esos emotivos instantes.

Javier Bardem ya no es el ligón de barrio de sus lejanos tiempos cuando vivía en la casa familiar cercana al parque del Retiro. Fue novio diez años de Cristina Payés. Y luego se le adjudicaron roces con Aitana Sánchez.Gijón, Ruth Gabriel, Belén Rueda… En Hollywood, con más de una, entre ellas Natalie Portman. Hasta que llegó a su vida Penélope Cruz. Su nombre harto sabido es que nos remite a la conocida canción con letra de Serrat y música de Algueró. Una de sus satisfacciones fue grabarla a dúo con Joan Manuel en un disco con fines benéficos.

La filmografía de Penélope supera los cincuenta títulos, el último, fechado este 2023, "Ferrari". Ha ganado mucho prestigio en Hollywood. Y mucho dinero. Se le adjudica una cifra alrededor de ochenta y cinco millones de dólares, que en los últimos tiempos se cotizaban a la par que el euro. El matrimonio reside en Los Ángeles. Ahora viajan menos, sobre todo ella, para estar muy cerca de sus hijos.

Cuida Penélope mucho su físico, lo que es natural siendo una estrella como ella, una de las que mejor vestida acude a la fiesta de los Óscar, o aquí en España durante los Goya. Últimamente se ha sometido a una intervención quirúrgica, llamada bichectomía que, a pesar de su extraño nombre, sirve como tratamiento de belleza sobre todo para los ojos, extirpando el exceso de piel en los párpados, afinando las facciones del rostro y estilizándolo. Toda una estrella, la más destacada internacionalmente entre las actrices españolas.