La publicación de las fotos íntimas del rey Juan Carlos y Bárbara Rey ha supuesto un bombazo informativo en nuestro país pero ha abierto una brecha más en la guerra familiar que la actriz mantiene con su hijo Ángel Cristo Jr., que habría vendido las imágenes que supuestamente tomó en 1994 a la revista holandesa Privé. A finales de 2023 ya habló en el programa de De Viernes de esas instantáneas y cómo su madre le habría convencido para tomarlas a pesar de que entonces solo tenía 12 años.
Desde entonces la exvedette ha negado que su hijo tuviera nada que ver con esas fotos, que formaban parte de su intimidad, y este miércoles se ha mostrado muy sorprendida con que su hijo haya podido llegar tan lejos. "No tengo palabras. Voy a hacer lo mismo que he hecho hasta ahora, utilizar la justicia. Estas fotos son mías, pertenecen a mi privacidad y mi hijo las ha sacado sin mi permiso", dijo Bárbara a Paloma Barrientos en unas declaraciones publicadas en Vanitatis. La artista insiste en que él nunca tomó esas fotos pero desde luego "nunca imaginé que fuera hacerlas públicas".
Las imágenes se publican en lo que parecía un momento de calma para ambos en el plano mediático. El hecho de que Bárbara publicara una foto en Instagram junto a su hijo parecía evidenciar que estaba preparada para un acercamiento pero tal y como recordó recientemente Barrientos en la crónica rosa de Es la mañana de Federico, los ataques del exconcursante Ángel a su madre están judicializados. "Bárbara le puede perdonar pero lo que le ha costado a Sofía, ayudando a la gente que tiene un problema con la droga y él decir lo que dijo con toda su mala intención...", recordó.
Como ya hiciera su madre Bárbara Rey, Sofía Cristo demandó a su hermano por vulnerar su derecho al honor y a la intimidad con algunas de las declaraciones que ha hecho sobre ella en diferentes exclusivas y programas de televisión en los últimos meses, causándole "graves daños y perjuicios" en forma de "trastornos de depresión y ansiedad".
Una demanda que es por lo civil y no por lo penal -ya que la hija de Bárbara Rey, al igual que la vedette, no quiere que Ángel vaya a prisión- que se ha preparado a conciencia analizando todas y cada una de las manifestaciones públicas que el exconcursante de Supervivientes 2024 ha hecho sobre su hermana.
Como apuntó su abogada, Irene Sorribas, "hemos aportado numeroso documentos y grabaciones de programas de televisión en los que la descripción que hace Ángel Cristo de su hermana, describiéndola siempre con admiración y cariño, es rotundamente opuesta a la que ha dado en los programas objeto de la demanda" en los que como asegura, el único fin del hijo del domador sería "lucrarse económicamente". Unas conductas que "están ocasionando graves daños y perjuicios en Sofía, que está sufriendo trastornos de depresión, ansiedad y desasosiego", según la letrada.