
Cayetano Rivera y María Cerqueira rompieron después de dos años de intensa relación a caballo entre España y Portugal. La pareja tomó la decisión de común acuerdo, sin terceras personas de por medio, reconociendo un desgaste debido a la distancia y un estilo de vida muy diferente.
Lucía Rivera reaccionó la separación de su padre y la presentadora portuguesa, con la que había entablado una entrañable amistad. "María es como mi segunda madre, la adoro", confesó a los micrófonos de Europa Press sin entrar en los detalles de la inesperada ruptura y apuntando que a ella no le corresponde hablar de la vida sentimental del torero.
Aquellas declaraciones dieron mucho que hablar y Lucía recibió un toque de atención por parte de su familia, tal y como reconoció entre risas en el último evento en el que ha participado. "Me van a matar por decir esto, pero el único visto bueno que hay por ahora, para mí, es María. Es adorable, hay una conexión y las adoro, de verdad", expresó, incluyendo a Kika, hija de María. "El otro día me echaron bulla por decir que era como mi segunda madre, pero es la verdad. Yo lo sentí así al menos", añadió.

La modelo confesó que no tiene "ni idea" de si hay posibilidades de reconciliación para la pareja, aunque dejó entrever que la relación entre su padre y María sigue siendo buena: "Está todo genial pero eso ya son cosas de ellos. Yo no me meto en las relaciones... Imagínate cómo sería que yo te preguntara por las relaciones de tus padres, sería rarísimo. Lo que pasa es que el mío es conocido y ahí el problema. Yo espero que todos los dos sean felices y ya está", sentenció con discreción.
Lo que sí confirmó es que Cayetano está en un buen momento. "Siempre está feliz, es una persona muy dura y sabe estar bien consigo mismo. Lo gestiona todo súper bien. Está en un momento raro también (por su retirada de los ruedos) pero creo que él tiene muchos planes en la cabeza", explicó.