
El futbolista bético Joaquín Sánchez Rodríguez se ha convertido, tras colgar las botas, en una de las novedades más sorprendentes en su papel de presentador de programas en televisión. Es un showman, un entretenedor ante las cámaras, por su gracia natural, el humor que transmite a los telespectadores. Si ya en su vida privada sus compañeros de equipo, sus amigos y familiares se partían de risa con sus chistes y ocurrencias, dio el salto a la pequeña pantalla cada vez que era entrevistado, caso de una noche que pasó por ‘El hormiguero’. Y entonces, los encargados de la programación en Antena 3 convinieron que Joaquín venía a ser algo más que un tipo divertido tras la barra de un bar. Con un guion y con orientación profesional, debutó en 2022 con ‘El novato’, entrevistando a populares personajes, mostrando entre pregunta y pregunta la chispa sevillana de su humor. La audiencia elevada fue la respuesta que esperaban en esa cadena. Después, en 2023, reafirmó su popularidad en un documental sobre su vida, ‘La penúltima y me voy’ y en 2024 acaparó una media de dos millones de seguidores del programa ‘El capitán de América’, un viaje por el Oeste de Estados Unidos, en compañía de Susana, su mujer, y las hijas del matrimonio, Daniela y Salma.
Viajando en un pequeño autobús, como si fuera una caravana en ruta por parajes que la familia desconocía, deteniéndose en enclaves previamente elegidos, Joaquín y los suyos se enfrentaban a divertidas aventuras y encuentros propios de esas películas, "road movies".
"El capitán de América" conquistó a la audiencia de Antena 3. Resulta que esta cadena, la que viene sumando con sus programas el liderazgo entre las televisiones de nuestro país, tenía en perspectiva un espacio similar al citado: un viaje de Joaquín y familia por el Japón. Y también otro, ‘Emparejados’. Este verano, programaron este último la noche de los sábados, donde Joaquín y Susana reciben a parejas que han de contar sus más y sus menos en su relación. Como quiera que ‘Emparejados’ obtuvo una favorable respuesta de la audiencia, ‘El capitán en Japón’ ha sido relegado, en espera de encontrar su acomodo, quizás en el primer trimestre de 2026. Aunque haya descendido el número de seguidores.
Decíamos que esa aventura de Joaquín, su esposa y sus hijas por el país del Sol Naciente, de norte a sur, la realizaron junto a un equipo técnico de Antena 3 en el pasado mes de junio. Un road trip. En una larga ruta por las principales ciudades y lugares nipones y lugares de atractivo turístico, a saber: Tokio, Monte Fuji, Takayama, Kyoto, Osaka, Okinawa… Puede suponerse que los guionistas del programa junto con las espontáneas reacciones del ex futbolista y familia, encontraron el modo de protagonizar toda clase de encuentros, provocaciones, gags, con el exclusivo fin de pasarlo bien transmitiendo a los telespectadores todo ello a través del humor, a veces disparatado, en plan chirigotas. Por cierto: Joaquín se llevó en su equipaje un montón de camisetas del Betis para repartirlas entre los nipones.

La producción de "El capitán en Japón" es de Atresmedia, que se ha reservado los contenidos de los capítulos grabados. Sólo han facilitado unas pocas imágenes de sus protagonistas. Por su parte, Joaquín ha deslizado un comentario acerca de cuándo se enfrentó a un luchador profesional. ¿Sería un especialista del sumo? Confía Antena 3 en que cuando se emita esa nueva serie, la audiencia responda favorablemente, en la creencia demostrada de que Joaquín y su familia son muy queridos y atrapan con su simpatía a cuantos disfrutan con sus peripecias y diálogos.
Joaquín Sánchez Rodríguez nació hace cuarenta y cuatro años en El Puerto de Santa María. Aunque estuvo en otros equipos de fútbol (Málaga, Valencia) fue en Sevilla donde, como centrocampista del Real Betis Balompié, se ganó con su juego la admiración de la hinchada verdiblanca, durante las catorce temporadas que perteneció al club de sus amores. Tanto es así que se convirtió en accionista tras invertir, que sepamos, un mínimo de un millón de euros. Pudo hacerlo sin preocupaciones económicas ya que se estima su patrimonio en alrededor de treinta y cinco millones de euros. Ha diversificado sus propiedades sobre todo en el sector inmobiliario.
Joaquín, que así lo conocen sin necesidad de recurrir a sus apellidos, lleva un cuarto de siglo unido a la sevillana Susana Saborido. Se habían conocido en el año 2000, casándose cuatro años más tarde en El Puerto de Santa María, patria chica del futbolista donde siempre gozó de la admiración popular. Aquella boda fue un acontecimiento local, al punto de que, invitados aparte, hubo docenas de curiosos que abarrotaron el templo. La pareja tiene dos hijas, Daniela, que cumple diecinueve años, y Salma, quince.
El matrimonio ha confesado en "Emparejados" llevarse muy bien, aunque han atravesado algunas crisis, como cuando se establecieron en Italia con sus retoños al haber fichado él por la Fiorentina. No se amoldaron a vivir en Florencia ni Susana ni sus hijas. En tiempos más recientes Susana se enteró de que su marido mantenía una relación a través de su móvil con una actriz porno llamada Claudia Bavel. Relación que muy pronto Joaquín tuvo que romper. Lo de su obsesión por Jennifer López no pasa de ser una broma. De lo que se deduce que Susana es muy celosa, pero Joaquín no se queda atrás, sabiendo que ella es muy atractiva. Si van por la calle y él se vuelve para mirar a alguna mujer que llame su atención la bronca está asegurada. Pero sus enfados duran poco. "Yo he cometido muchos errores – concede él – pero la vida va de eso, de equivocarte y salir adelante".
Es curioso que ambos hayan recalado en varios programas de televisión. Joaquín comenzó hace unos pocos años a grabar unos "spots" para una marca de cuchillas de afeitar. Y Susana debutó ante las cámaras como tertuliana del magazín semanal de Bertín Osborne en Canal Sur, y luego ya formando pareja con su marido en Antena 3. Sin ser profesionales del mundo del espectáculo y la comunicación, son ahora pareja habitual en la pequeña pantalla.

