
Las rosquillas son ese dulce que ha pasado de generación en generación y tiene tantas variantes como combinaciones se quieran hacer. Pueden ser de anís, con frutas, con chocolate, solo con azúcar.... hay cientos de combinaciones, tanto saludables como no.
Como desayuno, postre, con el café de media tarde... simplemente como antojo. Las rosquillas pueden comerse en cualquier momento de día y pueden prepararse con mucho azúcar o sin él.
Por ello, en Libertad Digital os presentamos estas rosquillas de canela y naranja que son ideales como desayuno o junto al café de media tarde y, además, no llevan azúcar añadido por lo que son más saludables que las del supermercado o las de la receta tradicional. Por ello, no olvides coger papel y bolígrafo para no perderte detalle de esta sencilla receta.
Ingredientes:
- media naranja
- 100gr de harina integral de trigo
- 60gr de mantequilla sin sal
- un huevo de gallina
- 49gr de dátiles
- dos cucharaditas y media de canela ceylan
Preparación:
Lo primero que debemos hacer es sacar tanto el huevo como la mantequilla de la nevera para utilizarlos a temperatura ambiente. Antes de empezar también, como dato, aunque ponga 100gr de harina es posible que necesitemos un poco más si la masa no nos queda suficientemente consistente, por eso es importante añadirla poco a poco.
Mientras tanto, ponemos los dátiles a remojo en agua caliente durante 10-15 minutos, una vez pasado ese tiempo los sacamos del agua y los machacamos con ayuda de un tenedor, reservamos para más tarde. Es momento también de poner a precalentar el horno a 180ºC.
El siguiente paso es, en un bol, añadir todos los ingredientes secos, es decir, la canela y la harina. Una vez unidas añadimos la mantequilla, previamente cortada en daditos, y vamos integrando con las manos hasta conseguir que no queden grumos.
En un bol diferente echamos el huevo, el jugo de media naranja, la ralladura de la piel de naranja y los dátiles. Mezclamos todo bien hasta conseguir una masa homogénea. Lo siguiente es mezclar los dos boles, es decir, echar en esta mezcla la de los ingredientes secos. Debemos tener paciencia a la hora de mezclar y hacerlo bien hasta conseguir que quede homogéneo.
Si seguimos las cantidades indicadas quedará una masa algo pegajosa que se nos irá pegando a las manos, por eso, debemos añadir un poco más de harina hasta que la masa sea suficientemente manejable sin pegarse a las manos.
Ahora lo metemos en los moldes de donuts o le damos la forma de rosquillas con las manos, lo colocamos en la bandeja del horno y, con calor arriba y abajo, lo horneamos durante 25 minutos. Debemos vigilar y dar la vuelta más o menos cuando lleven la mitad de tiempo. Luego simplemente dejar enfriar y a disfrutar!

