Las galletas son una gran merienda o desayuno de muchas familias españolas, pero qué mejor que hornear las de uno mismo para saber realmente los ingredientes que llevan ¿no? Además, hay tantas variedades que es imposible que uno se canse de cocinarlas.
Cómete unas deliciosas cookies veganas de chocolate hechas por ti mismo siguiendo esta receta fácil en Libertad Digital. Estás ricas galletas caseras no tienen ningún ingrediente de origen animal y su sabor es espectacular, nada que envidiar a las recetas de galletas clásicas.
No son galletas para todos los días, de hecho los dulces son caprichos para disfrutar de vez en cuando, pero si hay que pecar, mejor hacerlo bien. Lo bueno de esta versión es que están hechas con ingredientes sencillos y fáciles de encontrar. Si no puedes tomar gluten, yo probaría a usar la mitad de la harina de trigo sarraceno o de arroz integral y la otra mitad de harina de avena sin gluten o de almendras.
Por ello, desde LD os traemos una receta donde la base de las galletas es la avena, un alimento rico en fibra y proteína pero de sabor insípido. Por ello la juntamos con chocolate y hará las delicias de toda la familia. Coge papel y bolígrafo y a disfrutar.
Ingredientes (para tres galletas):
- dos plátanos maduros
- 30gr de chocolate negro 85%
- 30gr de copos de avena integral
- 20gr de harina de avena integral
- una cucharada de aceite de coco
- canela
Preparación:
Lo primero que debemos hacer es poner a precalentar el horno a 200ºC. Mientras preparamos las galletas lo tendremos listo.
Ahora, chafamos los plátanos con ayuda de un tenedor hasta que tengan textura de papilla. Les añadimos la canela, la harina y los copos y removemos bien hasta integrarlo todo.
Lo siguiente es colocar un trozo de papel vegetal en la bandeja del horno e ir echando la mezcla con ayuda de una cuchara. Lo horneamos a 200ºC durante 15-20 minutos.
Mientras tanto derretimos el chocolate con un poco de aceite de coco y cuando saquemos las galletas, con ayuda de una cucharita pequeña, echamos el chocolate por encima hasta bañar una cara de la galleta. Dejamos enfriar y listas para disfrutar.