Los mercadillos navideños más bellos de Europa

Desde finales de noviembre y durante todas las navidades, las ciudades centroeuropeas llenan sus plazas principales de puestos navideños con dulces típicos, juguetes y adornos tradicionales.

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Hamburgo

Alemania se llena de mercadillos navideños en el arranque del Adviento. No hay ciudad o pueblo sin él y son especialmente llamativos los de las grandes ciudades, como Berlín, Munich, Colonia o Hamburgo (en la imagen). Pero en ciudades algo más pequeñas el encanto es aún mayor.

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Hamburgo

Casi todos los mercadillos se instalan en la plaza del Ayuntamiento o en los márgenes del río. El de Hamburgo llena de puestos y luces la plaza mayor.

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Hamburgo

A diferencia de los mercadillos españoles, que se basan en los adornos navideños y los artículos de broma, los mercadillos alemanes están repletos de puestos de comida típica en la que no faltan, por supuesto, ni los guisos de carne ni las salchichas.

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Nuremberg

La bella ciudad de Núremberg aprovecha también su plaza mayor, arrasada en la Segunda Guerra Mundial, para instalar el mercadillo típico, que cuida la estética con toldos y estructuras de madera idénticos.

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Nuremberg

El dulce, en estas fechas, supera a la oferta salada. Destacan, sobre todo, los Lebküchen con forma de corazón: se trata de galletas de genjibre y canela con mensajes y tamaños de todo tipo.

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Leipzig

Los molinos de Navidad gigantes son otra constante de los mercadillos alemanes. Este de Leipzig se instala en la Iglesia de San Nicolás, donde nació el movimiento contra la dictadura que desembocó en la caída del muro de Berlín. Su versión reducida es habitual en todas las casas alemanas. Se mueve con el humo de las velas instaladas en su base.

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Leipzig

El Glühwein es otra de las tradiciones de los mercadillos centroeuropeos. Se trata de vino caliente y muy especiado, ideal para las bajas temperaturas. Se vende en tazas con el nombre de la ciudad y motivos navideños que el turista puede devolver al puesto a cambio de uno o dos euros o quedarse como recuerdo.

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Dresde

El casco antiguo de la ciudad de Dresde constituye también un marco perfecto para el mercado de Navidad, que se instala en la calle que desemboca en la reconstruida Iglesia de Nuestra Señora.

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Dresde

Muchos de los visitantes de los mercados navideños aprovechan para prepararse para lo más duro del invierno. Son habituales los puestos de zapatillas, bufandas, chalecos de lana y plantillas especiales para la nieve.

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Salzburgo

En Austria la tradición del mercado navideño está tan arraigada como en Alemania. Es también muy típico instalar pistas de patinaje.

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Salzburgo

Los adornos para el árbol también llenan los puestos de los mercadillos austriacos, cuna de villancicos como Noche de Paz. En la región del Tirol, son también habituales las figuras para el Belén, de madera y de todos los tamaños.

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Viena

La ciudad imperial brilla especialmente en Navidad. La plaza del Ayuntamiento está presidida por un abeto gigante y puestos dispersos alrededor.

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Viena

El dorado y el rojo son los colores más repetidos en los adornos para el árbol y en las coronas para las mesas.

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Innsbruck

En Innsbruck, al atractivo de recorrer los puestos y comer los dulces típicos se añade el encanto de ver las cumbres de los Alpes al fondo.

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Innsbruck

Un abeto adornado con cientos de luces preside la plaza del famoso "balcón dorado" de Innsbruck, resto de un palacio medieval que se ha convertido en lo más fotografiado de la ciudad.

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Estrasburgo

La ciudad francesa de Estrasburgo es aún más hermosa en Navidad. A sus canales y su centro histórico se añaden atracciones infantiles como ésta y un típico mercado navideño.

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Estrasburgo

Su ubicación, en la frontera entre Francia y Alemania, se deja notar en su mercado navideño, que rodea la catedral. Las luces, en especial las que recubren casi por completo este árbol que es ya un símbolo de la ciudad, terminan de completar la decoración.

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Basilea

Es quizás el mercadillo navideño más famoso de Suiza. Tan cuidado como los austriacos y alemanes, se sitúa en el casco antiguo y está lleno de puestos de artesanía.

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Basilea

El centro de la ciudad suiza se transforma en Navidad con sus luces, casetas y olor a almendra y canela.

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Budapest

La capital húngara se llena de luces, como el resto de capitales europeas, en Navidad. Los adornos llegan hasta el tranvía que rodea el casco histórico.

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Budapest

El mercadillo se sitúa también en el centro y en él hay mucho más que adornos navideños. En las últimas horas del día, sus numerosos puestos de comida ofrecen todo tipo de guisos perfectos para combatir el frío.

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Bruselas

La Grande Place de Bruselas se transforma en Navidad, cuando se combinan los adornos de los puestos con los haces de luz de los edificios históricos que rodean la plaza más conocida de Bélgica.

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Bruselas

Pista de patinaje y, por supuesto, decenas de puestos toman las calles del centro de Bruselas.

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Cracovia

Una de las atracciones de la ciudad polaca en Adviento es su mercado navideño, imprescindible para soportar las bajas temperaturas con dulces, bebidas y comida típica.

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Cracovia

Entre las especialidades que encontrar en los puestos están los pierogi, pasta rellena de distintas verduras. Pero no faltan opciones más calóricas como éstas.

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Tallín

La capital de Estonia es el escenario ideal para un mercadillo tradicional de Navidad. Sus calles y edificios medievales dan un entorno de cuento a los puestos.

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Tallín

La plaza principal, junto al castillo, es el lugar donde se colocan los puestos principales del mercado.

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Praga

Una de las capitales más bellas de Europa es también una ciudad ideal para disfrutar en Navidad. En el casco antiguo, atestado de turistas en estas fechas, se pueden encontrar todo tipo de adornos navideños y platos típicos checos.

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Praga

En la ciudad se instalan varios mercados de aire medieval, como éste de la plaza de la Ciudad Vieja. No falta el vino caliente para combatir el frío.

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Zagreb

Más desconocido que los anteriores, el mercado de Navidad de Zagreb se instala en la plaza principal del casco histórico y, como el resto, se llena de luces al anochecer. Cuenta con un gran árbol y gran animación entre sus puestos con dulces navideños típicos de Croacia.