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Carta de amor

Los colores del sentir

Magenta, amarillo y naranja un rayito de luz que se cuela por la persiana cerrada.

Carta de amor: "Los colores del sentir"

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Levanto un dedo para llegar al hilito incandescente mientras observo como mi mano corta su camino igual que hiciste tú cuando apareciste en mi vida. Me diste todo para luego no dejarme nada, pero hoy ya no me duele, no hay nada... y el ambiente huele a hielo blanco.

Ya te fuiste, aquel día era de color gris sucio y negro. Te miraba desde la ventana y la desesperación me hacia pensar en métodos infantiles muy usados en mi infancia y que siempre me funcionaron en aquella época. Tú ya en la calle y yo mirándote desde la ventana, esperaba que antes e llegar a cinco, girases la mirada hacia mí, uno, dos, tres... vamos, vamos, solo date la vuelta y mira hacia la ventana, cuatro... y entre lágrimas un lento y susurrado cinco salía de mis labios, pero no me miraste. Te fuiste, el orgullo te sobrepasa y sigues tu camino auto convenciéndote de que es mejor odiar a sufrir queriéndome.

Lágrimas rojo púrpura por culpa del corazón que se deshace y escapa por mis ojos. Ya no te esperaré... la esperanza junto con su color verde, ya no existen en mi vida. Aquí estoy escurriendo mi dolor impregnado en la piel, pronto ya estaré seco. Seco..., amarillo claro y ocre, color otoño, sin vida, crujiente y muerto. Me tiré al acantilado del desaliento y mientras caía me di cuenta de mi error, entonces subí las persianas para que entrara el sol y ya con luz reorganicé los colores de mi vida, limpié los pinceles con los que pintaba mis sentimientos y desovillé esas ideas enmarañadas.

Ya todo era blanco cálido y luz melocotón, Ahora puedo esculpir mi futuro ya sin ti. No tienes color, ni siquiera te veo en negro. Ya eres cristalina, límpida, transparente... te vas nebulosa, sin olor. Vítrea y sin amor. La soledad escribirá sobre mí, historias de los dos, vacías de todo y llenas de nada. Falsa mester de juglaría... sigue cantando en otro lugar tus cuentos que yo quedé sordo de ti. Ahora soy... azul celeste y añil.

Javier C

En Chic

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