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Tu decoración de San Valentín

Es hora de demostrar a tu pareja que eres capaz de preparar algo romántico. Te dejamos algunas ideas.

Es hora de demostrar a tu pareja que eres capaz de preparar algo romántico. Te dejamos algunas ideas.
Acierta en San Valentín | Flickr/joseloya

El día de San Valentín está a la vuelta de la esquina, y si bien es cierto que el amor debe celebrarse cada día del año, el 14 de febrero es una ocasión perfecta para hacer algo especial con tu pareja.

No es necesario un gran regalo material o ir a cenar a un buen restaurante, uno de los mejores regalos que podéis hacerle a vuestra pareja es preparar una buena mesa romántica para los dos. Vamos a ofreceros algunos consejos para que ambientéis vuestro hogar como la ocasión lo merece.

Es sabido por todos que el rojo es el color estrella de San Valentín. Es la ocasión perfecta para decorar la mesa en tonos rojos y blancos y esparcir sobre ella unos cuantos pétalos de rosa. Una buena idea es colocar un mantel en tonos escarlata y servilletas blancas anudadas con un lazo de color rojo, pero si no queréis caer en los tópicos podéis decorar la mesa con los colores favoritos de vuestra pareja, ¡seguro que le sorprenderéis!

Crear ambiente es muy importante y un buen uso de la iluminación puede ayudarnos a diseñar un espacio mágico. Unas cuentas velas repartidas a lo largo y ancho de la mesa son la clave, pero siempre hay que tener cuidado de no colocarlas cerca de elementos que puedan prender. Las hay de distintos tamaños, formas y colores pero recomendamos las velas aromáticas y cortas ya que así no habrá ningún elemento que nos impida disfrutar de la imagen de nuestro compañero o compañera durante la cena.

Los corazones son el símbolo característico de las decoraciones de San Valentín, pero no necesariamente nuestra mesa tiene que estar repleta de este tipo de elementos. Podemos crear palabras de amor y cariño con alambre y recubrirlas de diferentes materiales, como cintas de raso o lana. Otra original y divertida opción la encontramos en la nevera, tanto en su interior, con un postre capaz de derretí y endulzar corazones, como su exterior. Éste último puede convertirse en un improvisado mural donde sorprender a tu pareja con un cariñoso mensaje o una fotografía especial para ambos. Lo más importante es cuidar los detalles para conseguir ese toque de romanticismo y sofisticación que deseamos.

Para completar una decoración ideal sin entrar en grandes gastos, una buena idea es crear un centro de mesa casero. Es suficiente con escoger unas cuantas rosas rojas y rosas, cortarlas, acompañarlas de unas hojas de helecho y ponerlas en un jarrón que tengamos en casa. Toda una apuesta por la sencillez. También podemos elevar un poco la sofisticación y jugar con los elementos. Para ello necesitaremos un jarrón ancho tipo pecera en el que introduciremos arena y lo llenaremos de agua. Después colocaremos encima pequeños capullos de tela plastificada y alguna vela flotante aromática. Será un auténtico placer para todos los sentidos.

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