El aceite de rosa mosqueta es un ingrediente natural que se ha utilizado durante siglos debido a sus diversos beneficios para la salud y la belleza. Extraído de las semillas del rosal silvestre Rosa moschata o Rosa rubiginosa, este aceite es rico en ácidos grasos esenciales, antioxidantes y vitaminas. Sirve para la piel de manera preferente pero tiene multitud de beneficios para la salud en general.
El motivo de que lleve siglos empleándose en la cosmética, especialmente femenina en los últimos tiempos, es que no solo sirve para todos los tipos de piel, sino que también hidrata, ayuda con las imperfecciones e incluso previene las arrugas.
¿Qué es el aceite de rosa mosqueta?
El aceite rosa de mosqueta procede de las semillas del arbusto Rosa rubiginosa, originaria de los Andes en el caso de Repavar. Es un aceite de origen natural sin productos químicos que puedan dañar la piel.
Más concretamente, el aceite de mosqueta es un aceite vegetal que se extrae directamente de las semillas de la Rosa Moschata o Rosa Rubiginosa, un arbusto de la familia de las rosas que contiene numerosos ácidos grasos esenciales, como el omega3, omega6 y ácido linoleico, además de vitaminas A, C o E y antioxidantes naturales como el retinol.
La Rosa Mosqueta esconde en sus semillas, el secreto de la eterna juventud: un aceite rico en ácidos grasos esenciales, que estimulan la renovación cutánea y suaviza la piel, previniendo, así, el envejecimiento cutáneo.
¿Cuáles son sus beneficios?
Uno de los beneficios más conocidos del aceite de rosa mosqueta es su capacidad para mejorar la apariencia de la piel. El motivo es su alto contenido de ácidos grasos esenciales, como el ácido linoleico y el ácido linolénico, gracias a los cuales ayuda a hidratar y nutrir la piel, mejorando su textura y suavidad. Dentro de esta mejora de la apariencia destacan:
- Suaviza las arrugas. El aceite de rosa mosqueta es rico en vitamina C, un potente antioxidante que ayuda a que las arrugas desaparezcan. Asimismo, las grasas prensadas en frío del aceite ayudan a combatir las arrugas porque al aplicarse actúan como emolientes que suavizan, hidratan y favorecen la regeneración celular de la piel.
- Ilumina la piel. El aceite de rosa mosqueta también contiene vitamina E y componentes fenólicos que hacen que la piel luzca más brillante y homogénea. Asimismo, la combinación de las vitaminas C y E tiene una eficacia moderada a la hora de reducir las ojeras, pero hay que tener cuidado a la hora de aplicarlo en las ojeras porque se corre el riesgo de que se hinchen más.
- Corrige la hiperpigmentación. La pigmentación cutánea aumenta a medida que se envejece. Los principales causantes son la exposición solar y el exceso de melanina que hace que a la piel se oscurezca por zonas. Para tratar de corregirla es tan sencillo como, además de echarse protección solar todas las mañanas, se puede usar aceite de rosa mosqueta.
- Ayuda con la piel grasa. Aunque pueda parecer contraproducente, el aceite de rosa mosqueta ayuda a equilibrar la producción de sebo, lo que significa que también es útil para las pieles grasas. El motivo es que la piel absorbe rápido el aceite y este evita que los poros se obstruyan, de ahí que sea tan bueno para personas con acné y piel grasa.
- Superhidratante. La hidratación es otro de los muchos beneficios del aceite de rosa mosqueta. Esto se debe a que es rico en ácido linoleico, un emoliente que suaviza la piel, de hecho, más del 47 - 50% del aceite de rosa mosqueta se compone de este emoliente.
- Estimula la producción de colágeno. El aceite de rosa mosqueta contiene vitamina C en altas cantidades, algo muy necesario para producir colágeno. El colágeno es una proteína presente en el cuerpo de forma natural que ayuda a mantener la piel elástica y flexible, de hecho, representa alrededor del 75% del peso en seco de la piel, de ahí que sea tan importante para mantenerla sana. Por suerte, el aceite de rosa mosqueta contiene galactolípidos que estimulan su producción y reparación.
- Protege la piel. La barrera de la piel, es decir, la capa más externa, es la que protege del calor, el frío, el estrés y la radiación ultravioleta. Cuanto más fuerte sea, menos problemas cutáneos se podrán tener. Gracias a su alto nivel de antioxidantes, el aceite de rosa mosqueta refuerza la barrera de la piel. Esto también se debe a su contenido fenólico, el cual resulta especialmente útil contra la radiación ultravioleta.
Otro beneficio importante del aceite de rosa mosqueta es su capacidad para ayudar a tratar las estrías. El motivo es que su acción regeneradora y cicatrizante puede ayudar a reducir la apariencia de las estrías y mejorar la elasticidad de la piel, especialmente durante el embarazo o después de perder peso. Además de las estrías ayuda con otro tipo de daños en la piel:
- Disimula las cicatrices. Las investigaciones científicas han descubierto que el aceite de rosa mosqueta ayuda a disimular de forma considerable las cicatrices de acné, sobre todo si se aplica directamente sobre las más recientes. En general, aplicar aceite de rosa mosqueta de forma regular en las heridas ayuda a disminuir las cicatrices en el plazo aproximado de seis semanas.
- Perfecto para las imperfecciones. Aunque suene contraproducente usar aceite de rosa mosqueta si se tiene acné, este posee propiedades antiinflamatorias, por lo que puede ser una buena solución. También presenta una baja comedogenicidad, lo que significa que no obstruye los poros. Una buena forma de incorporarlo a la rutina de belleza es echarse unas gotas después de lavar la cara por la noche y antes de ponerse crema hidratante por la mañana.
Además de su efecto sobre la piel, el aceite de rosa mosqueta también tiene beneficios para el cabello. Sus propiedades hidratantes y nutritivas pueden ayudar a fortalecer el cabello, prevenir la sequedad y reducir el frizz. También se ha utilizado para tratar problemas del cuero cabelludo, como la caspa y la dermatitis seborreica.
El aceite de rosa mosqueta también es conocido por sus propiedades antiinflamatorias y analgésicas. Se ha utilizado para aliviar los síntomas de afecciones como la artritis, la osteoartritis y el dolor muscular. Aplicado tópicamente, puede ayudar a reducir la inflamación y aliviar el malestar.
Por último, el aceite de rosa mosqueta es un aliado para la salud del corazón. Sus ácidos grasos esenciales, como el omega-3 y el omega-6, ayudan a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos en la sangre, lo que a su vez puede ayudar a prevenir enfermedades cardiovasculares.