Todo el mundo tiene papel de cocina en su hogar ya que es un gran aliado para la limpieza en la cocina y para numerosas tareas que se desarrollan en ella, y está lleno de ventajas que hay que saber aprovechar. De hecho, sirve para más estancias de la casa y muchas más cosas de las que uno se puede imaginar. Estos grandes rollos permiten hacer casi cualquier cosa en la cocina con ellos para convertirla en una sala más limpia, habitable y más higiénica.
Sin embargo, entre sus ventajas también está la posibilidad de hacer sus ingredientes más sanos y más duraderos. Solamente es cuestión de ingenio y de saber aprovechar las ventajas de esta celulosa llena de posibilidades.
El papel de cocina, ese compañero fiel en la cocina para limpiar derrames y secar platos, tiene usos mucho más versátiles de lo que uno pueda imaginar. Más allá de su función obvia, este humilde artículo puede solucionar problemas inesperados en el hogar. Aquí hay algunas formas sorprendentes de aprovechar el papel de cocina:
- Descongelar el pan. Cuando se descongela pan en el horno o el microondas, se puede encontrar uno con el problema de su textura, ya que suele ponerse muy duro. Por ello, si se desea evitar que esto suceda, la clave es envolver el pan en papel de cocina húmedo, y así saldrá del horno calientito y como recién hecho.
- Absorber grasa de alimentos fritos. Después de cocinar alimentos fritos, se deben colocar los alimentos sobre papel de cocina para absorber el exceso de grasa. Esto ayuda a que los alimentos sean más saludables y menos grasosos.
- Preservar hierbas frescas. Envolver hierbas frescas en papel de cocina ligeramente húmedo y colocarlas en el refrigerador en una bolsa de plástico ayudará a controlar la humedad y prolongar la vida útil de las hierbas.
- Evitar que las verduras se marchiten. Envolver verduras frescas y lavadas en papel de cocina antes de guardarlas en el refrigerador. El papel absorberá el exceso de humedad y evitará que las verduras se marchiten rápidamente.
- Mantener los vegetales frescos por más tiempo. Se puede cubrir el fondo del cajón de verduras del frigorífico con papel absorbente, esto servirá para prolongar la vida y buen aspecto de los vegetales, haciendo que duren más tiempo. Esto se debe a que el papel absorbe el exceso de humedad, evitando que las verduras se remojen, magullen o empiecen a cubrirse de moho.
- Quitar la humedad del cajón de las verduras. Del mismo modo que es recomendable evitar el exceso de humedad en las verduras para evitar mohos, en el cajón de las verduras es una gran solución poner una cama de papel de cocina que actúe de quita-humedad. Además, se quedará con cualquier derrame de jugo que se produzca, ralentizando que este llegue a las otras verduras.
- Hacer que las ensaladas sean más crujientes. Si se ha lavado lechuga u otras verduras para ensaladas y se desea que se mantengan crujientes, lo mejor es colocarlas entre capas de papel de cocina en el refrigerador para absorber la humedad. Además, si se consume lechuga de la que viene previamente cortada en bolsas de plástico se puede introducir un pedazo de papel de cocina dentro y durará más tiempo fresca.
- Prueba de madurez de frutas. Envolver frutas que aún no estén maduras en papel de cocina y guardarlas a temperatura ambiente. El papel acelerará el proceso de maduración al atrapar los gases etileno liberados por las frutas.
- Quitar la grasa del caldo. Cuando se prepara caldo casero de carne, pollo, cerdo o huesos, se va formando una pequeña capa de grasa en la superficie que no a todo mundo le gusta. Colarlo puede parecer una solución, pero la verdad es más lento y el colador debe ser muy fino. Pero, una solución mucho más sencilla y al alcance de todos es poner un poco de papel absorbente de manera delicada sobre la superficie del caldo, para que la grasa se vaya pegando al mismo.
- Sacar el exceso de agua del pescado. Cualquier pescado congelado, antes de saltar a la sartén, tiene que ser secado en ambas caras con este tipo de papel para retirar el exceso de agua. Este truco también es muy útil con los pescados frescos envasados al vacío.
- Retirar la piel del pollo. Al momento de cocinar un pollo crudo, es muy difícil retirar la piel del pollo, ya que se tira y se termina con las manos impregnadas de grasa. Para que esto no vuelva a pasar, es tan sencillo como hacer un corte entre la carne y la piel del pollo desde donde poderla levantar, y cubrir el resto de la piel con un trozo de papel absorbente. La piel se pegará a él y se podrá tirarla con mayor facilidad.
- Enfriar más rápido las botellas. Enfriar las botellas de las bebidas favoritas en el congelador es más rápido que el frigorífico, pero también toma su tiempo. Si se desea acelerar el proceso, es tan simple como envolver las botella en papel de cocina mojado y meterlas al congelador. El agua tiene un punto de congelación más alto que dichas bebidas, por lo cual se enfriará más rápido y ayudará a reducir la temperatura del contenido por transferencia.
- Como filtro de emergencia. El papel de cocina grueso y de buena calidad puede servir como un filtro para café de emergencia. Este truco es tan útil para el hogar si no quedan filtros como para cuando uno sale de vacaciones.
- Evitar la suciedad del microondas. Al calentar alimentos en el microondas, cubrir el plato con papel de cocina puede evitar salpicaduras y derrames desordenados. Simplemente hay que colocar una hoja encima del plato y calentar como de costumbre. El papel absorberá la humedad y las salpicaduras.
- Evitar manchas de aceite en la cocina. La botella de aceite es un elemento indispensable de la cocina y, ya sea que se guarde junto a la estufa o en la alacena, siempre se ubica de inmediato su lugar por las manchas redondas de aceite que va dejando en la superficie, y que es muy molesto limpiar cada vez. Por eso, lo mejor es colocar un cuadro de papel doblado en el lugar justo donde queda el aceite, ya que es más sencillo reemplazarlo que frotar con una esponja. También se puede envolver la botella con un poco de papel de cocina para evitar que escurra.
- Prevenir manchas de cera. Al encender velas, si uno no tiene un portavelas que cubra los derrames de cera, lo mejor es colocar una hoja de papel de cocina debajo para atrapar cualquier goteo de cera.
- Limpiar electrodomésticos y superficies delicadas. El papel de cocina es suave y no abrasivo, lo que lo convierte en una excelente opción para limpiar pantallas de dispositivos electrónicos, gafas y otras superficies delicadas sin rayarlas.
- Limpiar las ventanas. Existen muchos productos en el mercado que prometen dejar los vidrios y espejos como nuevos, sin manchas ni rayones. Lo cierto es que el material más efectivo para lograrlo es el papel de cocina. Y tampoco es necesario rociar productos caros ya que, por ejemplo, el vinagre blanco hace maravillas.
- Cuidar ollas y sartenes. El contacto de una olla con otra cuando se guardan apiladas puede ocasionar problemas como rayones en el teflón u oxidación, en especial si se guardan justo después de haberlas lavado. Para evitar estos problemas y lograr que duren como nuevas por más tiempo, lo ideal es siempre poner papel absorbente entre ellas.
- Toallitas de limpieza. El papel de cocina es perfecto para empapar cualquier superficie de la cocina en vinagre de limpieza, o de cualquier detergente o producto de limpieza, y dejarlo actuar durante unos minutos, creando una especie de toallita húmeda casera. Esta solución hará que el vinagre o el producto en cuestión no se escurra y siga actuando sobre la superficie a limpiar, de un modo muy útil y eficiente.
- Toallitas perfumadas. El papel de cocina también se puede convertir en unas toallitas, pero en la secadora, de manera que perfumen toda la ropa que allí se está calentando. Esto es posible agregando unas gotas de aceite esencial a un papel de cocina puesto junto a la ropa en el programa de secado.
- Prensado de flores. Utilizar papel de cocina como una capa absorbente en el proceso de prensado de flores. Es tan sencillo como colocar las flores entre capas de papel de cocina y colocar pesos encima para secarlas y preservar su forma.