
Una buena alimentación es esencial para estar sano y sentirse bien, para el cuidado de la piel, el cabello y las uñas también. ¿Qué nutrientes necesitan? Los más importantes son los ácidos grasos omega 3, proteínas y antioxidantes, el motivo es que ayudan a mantener el cabello fuerte, evitando problemas como la sequedad y el quiebre.
En la actualidad existen numerosos productos cosméticos que ayudan a conservar un cabello sano pero, ante todo, la nutrición desempeña un papel principal. Por eso, independientemente de otros cuidados, es esencial hacer buenas elecciones alimentarias. El problema es que no todo el mundo le prestan atención y hay gente que sigue limitando su rutina capilar a la aplicación de tratamientos costosos y llevando malas rutinas alimentarias. Por este motivo muchas personas presentan debilidad, caída excesiva, grietas y otros síntomas que van más allá de lo estético.
Nutrientes que necesita el cabello
- Proteínas: El cabello está compuesto en su mayoría de proteínas, por lo que es esencial incluir fuentes de proteínas en la alimentación diaria. El pescado, los huevos, la carne magra y las legumbres son excelentes opciones para fortalecer el cabello y fomentar su crecimiento.
- Hierro: La deficiencia de hierro puede causar debilidad y pérdida de cabello. Para evitarlo, lo mejor es consumir alimentos ricos en hierro como espinacas, lentejas, carne de res magra e hígado.
- Vitamina C: Esta vitamina es esencial para la absorción de hierro, por lo que es importante incluir alimentos como cítricos, fresas, kiwis y pimientos en la dieta para asegurar un adecuado suministro de hierro a los folículos capilares.
- Biotina: También conocida como vitamina B7, la biotina es fundamental para el crecimiento del cabello. Se puede encontrar en alimentos como nueces, almendras, aguacates y huevos.
- Vitamina A: La vitamina A es importante para mantener el cuero cabelludo saludable y evitar la sequedad. Los alimentos como zanahorias, batatas, espinacas y calabaza son ricos en vitamina A.
- Ácidos grasos omega-3: Estos ácidos grasos esenciales se encuentran en pescados grasos como el salmón, las nueces y las semillas de chía. El ácido graso omega-3 es importante porque ayuda a mantener el cabello brillante y fuerte además de beneficiar la salud de los folículos pilosos y las cutículas. Aunque el organismo no lo produce, sí asimila cantidades significativas cuando se toman, al menos, dos porciones a la semana.
- Zinc: El zinc es necesario para el crecimiento del cabello y la reparación de los tejidos. Las ostras, los cereales integrales y las nueces son buenas fuentes de zinc.
- Vitamina E: Esta vitamina antioxidante ayuda a mejorar la circulación sanguínea en el cuero cabelludo, lo que favorece el crecimiento del cabello. Los alimentos ricos en vitamina E incluyen las almendras, las semillas de girasol y el aceite de oliva.
Alimentos para un cabello sano
- Aguacate: El aguacate contiene alto niveles de ácidos grasos esenciales y antioxidantes como vitamina A, E y vitamina C. Además, también posee numerosos aminoácidos que juntos contribuyen a nutrir el cuero cabelludo para evitar la caída y promover el crecimiento saludable.
-
Huevos: El huevo es uno de los mejores alimentos para complementar cualquier comida ya que aporta proteínas, grasas y minerales. Estos nutrientes ayudan a mejorar el rendimiento físico y mental, estimulando el metabolismo para un óptimo gasto energético. Además, debido a su contenido de vitamina B12, cuida el cabello, las uñas y la piel. Una deficiencia de este nutriente puede ser detonante de caída excesiva, deshidratación y enfermedades.
- Verduras de hojas verdes: Las verduras como la espinaca y la kale son ricas en vitaminas y minerales, incluyendo hierro, vitamina A y vitamina C, que son esenciales para un cabello saludable ya que estimulan la segregación de los aceites que mantienen un buen nivel de hidratación. También contienen proteínas de fácil asimilación y sustancias antioxidantes que fortalecen sus estructuras para detener la caída y el quiebre. Algunas de las opciones incluyen espinacas, brócoli, coles, acelgas y berros.
- Legumbres: Aunque muchos las evitan por su sabor, son una fuente principal de biotina, hierro y aminoácidos que promueven la salud del cabello y las uñas. La biotina es una sustancia necesaria para el crecimiento del pelo, pues estimula las células del folículo piloso. Además, favorece las uñas, pues minimiza las grietas y el debilitamiento. Las legumbres más altas en estos nutrientes son las habas, las lentejas, los frijoles, los guisantes y los garbanzos.
- Carnes magras: Tanto el lomo o solomillo como las carnes blancas, como el pollo, el pavo o el conejo, son una fuente extraordinaria de proteínas completas con complementos imprescindibles para garantizar la regeneración y el crecimiento adecuado del cabello y también las uñas. Esto sucede porque el pelo está compuesto mayoritariamente por una proteína, la queratina, por lo que la dieta debe proporcionar el material necesario para que el organismo pueda producirla con normalidad.
- Frutos secos: Los aminoácidos esenciales y las grasas saludables de las almendras, avellanas, nueces, anacardos o pistachos hacen que sean una buena opción para fortalecer el pelo desde el interior. Estos alimentos contienen vitaminas del complejo B que son necesarias para reducir el exceso de caída y las alteraciones del cuero cabelludo. Pero siempre hay que tomarlos en crudo y sin sal y solo un puñado al día, ya que son altos en grasas.
- Agua: Mantenerse hidratado es esencial para la salud general del cuerpo y del cabello. Beber suficiente agua ayuda a mantener el cuero cabelludo hidratado y a prevenir la sequedad y la fragilidad.
¿Cómo fortalecer el cabello según la estación del año?
Es verdad que hay que cuidar el cabello durante todo el año, aunque cada estación tiene sus productos de temporada y por eso es mejor optar por alimentos estacionales y de proximidad.
- Primavera: En primavera las fresas, espárragos, berenjenas, endivias o las habas van bien para fortalecer el cabello, además de los nísperos y los albaricoques.
- Verano: El pescado azul y la sardina, las frutas como el melocotón, las frambuesas o las grosellas y las verduras como el calabacín, el tomate, la remolacha o las judías verdes son alimentos que ayudan a fortalecer el pelo durante el verano.
- Otoño: En otoño, se recomienda hacer una dieta rica en alimentos de hoja verde, como las espinacas, las coles o las acelgas. Además, de setas ricas en calcio, hierro, zinc y vitaminas A, B y C.
- Invierno: La coliflor, brócoli, guisantes, alcachofas y frutas como el plátano y la uva. Durante el invierno hay que tomar también alimentos ricos en Vitamina C (cítricos), debido a la poca exposición solar.

