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El mecanismo oculto con el que algunos animales aseguran su descendencia: si una cría muere, otra puede ocupar su lugar

La sorprendente estrategia de los animales para sobrevivir en ambientes difíciles.

La sorprendente estrategia de los animales para sobrevivir en ambientes difíciles.
El zoológico de Halberstadt (Alemania) cuanta con 3 crías de canguro | LD/ Agencias

En el reino animal, la supervivencia depende de estrategias ingeniosas. A lo largo de millones de años de evolución, las especies han enfrentado condiciones ambientales cambiantes, depredadores, escasez de recursos y otros desafíos que amenazan la continuidad de sus linajes. Para hacer frente a estas dificultades, muchos animales han desarrollado adaptaciones sorprendentes que les permiten proteger, alimentar y reproducir a sus crías en los momentos más oportunos. Desde cambios en el comportamiento hasta mecanismos fisiológicos complejos, estas estrategias buscan aumentar las probabilidades de éxito reproductivo y garantizar que las siguientes generaciones puedan crecer en un entorno favorable. Una de las más fascinantes es la capacidad de algunas especies para pausar el desarrollo de sus embriones hasta que las condiciones externas sean más propicias.

Una de estas estrategias es la diapausa embrionaria, un proceso que permite que un embrión previamente fecundado permanezca en estado de desarrollo suspendido dentro del útero. Si una cría no sobrevive, la hembra puede reactivar ese embrión y continuar la gestación en un momento más favorable para su supervivencia y la de la madre. De esta manera, puede dar a luz rápidamente, después de un tiempo (que varía según la especie), a una nueva cría sin necesidad de un nuevo apareamiento, lo que representa una ventaja crucial en condiciones adversas. Cabe destacar que no es un proceso inmediato, pero sí mucho más rápido que iniciar una nueva gestación.

Este mecanismo, que garantiza la continuidad de la especie en entornos difíciles, es bien conocido en marsupiales como los canguros, los wallabies o los quokka, más conocidos como "el animal más feliz del mundo". En estos animales, la cría pasa sus primeros seis meses dentro de la bolsa marsupial, y si por alguna razón no sobrevive, la madre puede activar inmediatamente el desarrollo de un embrión en pausa.

Sin embargo, la diapausa embrionaria no es exclusiva de los marsupiales. También se ha documentado en otros grupos de animales como ratones, murciélagos, visones, tejones, osos panda, y en algunas especies de ciervos, reptiles y peces. En todos los casos, este mecanismo funciona como una herramienta de supervivencia que permite a las hembras sincronizar el nacimiento de sus crías con el entorno más adecuado.

La diapausa embrionaria es una muestra asombrosa de cómo la evolución ha permitido a distintas especies desarrollar soluciones similares frente a los desafíos del medio ambiente, adaptándose con precisión para maximizar sus posibilidades de supervivencia.

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