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Sánchez regala 60 millones a la OMS mientras la sanidad española colapsa

Sánchez envía 60 millones a la OMS mientras la sanidad española sufre recortes, listas de espera y falta de medicamentos.

El Gobierno de Pedro Sánchez ha decidido abrir la cartera y regalar 60 millones de euros a la Organización Mundial de la Salud (OMS). Mientras tanto, la sanidad pública sigue en estado crítico: falta de medicamentos, escasez de médicos y listas de espera interminables.

Esta generosidad internacional no es casual. Coincide con la entrada de la ministra de Sanidad, Mónica García, como representante europea en el Comité Ejecutivo de la OMS. En otras palabras, mientras España financia a la OMS, su ministra se asegura un puesto en ella.

Un respaldo político con segundas intenciones

PSOE y SUMAR han defendido esta inyección de dinero bajo el pretexto de fortalecer la salud global. Sin embargo, el respaldo del PSOE y SUMAR a la OMS no solo responde a un supuesto compromiso con la salud global, sino que también se enmarca en una estrategia política tras la anunciada salida de Estados Unidos de la Organización Mundial de la Salud.

En una iniciativa registrada en el Congreso, SUMAR advertía: "La reciente decisión de Estados Unidos de retirarse de la OMS a partir del 22 de enero de 2026 supone una amenaza a la estabilidad y trabajo adecuado de este sistema multilateral, con posibles implicaciones negativas para la salud global. Este anuncio muestra una tendencia creciente en nuestro contexto político, que niega el valor de la acción colectiva multilateral para abordar problemas comunes.".

Por su parte, el PSOE ha registrado una Proposición No de Ley (PNL) en la que afirma: "Desde el Grupo Socialista, en este momento histórico en el que uno de los países que proporcionaba una mayor contribución a la organización ha decidido abandonarla, consideramos necesario que el resto de los países, entre ellos España, siga cooperando y contribuyendo de manera decidida con la OMS, con financiación suficiente.".

Además, aseguran su compromiso de: "Seguir contribuyendo financieramente con la OMS, para fortalecer su papel en la protección de la salud y la seguridad de la población mundial ante los nuevos retos sanitarios emergentes".

Sin dinero para España, pero generosos con la OMS

Mientras PSOE y SUMAR justifican los millones de euros a la OMS, el Plan Nacional de Prevención del Suicidio apenas cuenta con 18 millones en tres años, es decir, 36 céntimos por ciudadano. Una cantidad irrisoria si se compara con los 35 millones de euros que el gobierno ya ha entregado a la OMS en 2024 y los 60 millones de euros que ahora Sánchez transfiere a la organización.

Las prioridades del Gobierno quedan aún más en evidencia cuando se analizan otros datos. La salud mental sigue sin recursos, con anuncios grandilocuentes por parte de Mónica García como los 3 millones de euros para apoyo psicológico en las zonas afectadas por la DANA, lo que equivale a apenas 7 céntimos al mes por valenciano.

Las enfermedades raras, otro ámbito desatendido, carecen de financiación suficiente para la investigación y los tratamientos. Aunque Sanidad presume de haber financiado 17 nuevos fármacos en 2024, lo cierto es que cuatro de cada diez medicamentos huérfanos en España no cuentan con financiación pública. La creación de la red ÚNICAS, con una inversión de 22 millones de euros para tratar enfermedades raras pediátricas, tampoco resulta impresionante cuando se recuerda que la OMS recibirá más del triple.

Y la falta de financiación en España golpea especialmente a los tratamientos contra enfermedades graves. Sanidad ha denegado recientemente la financiación de 11 de los 19 fármacos contra el cáncer aprobados en Europa, mientras el Gobierno sigue destinando fondos a la OMS sin restricciones.

No parece haber dinero para reducir las listas de espera, financiar fármacos, mejorar la atención primaria o reforzar las condiciones laborales de los sanitarios, pero sí para comprar influencia en organismos internacionales.

¿Para quién gobierna Sánchez?

En un contexto donde los médicos protestan por la reforma del Estatuto y los pacientes esperan meses para ser atendidos, el Gobierno sigue priorizando su imagen internacional sobre la salud de los españoles.

Si hay millones para la OMS, ¿por qué no hay para la sanidad española? ¿Cuántos medicamentos podrían haberse financiado con esos 60 millones? ¿A quién beneficia realmente esta generosidad con la OMS?

Lo que está claro es que, en la España de Pedro Sánchez, la salud de los ciudadanos no es una prioridad. La salud global es importante, pero no puede ser una excusa para desatender a quienes necesitan atención en su propio país.

La generosidad de Mónica García tiene fronteras claras: millones para la OMS, migajas para los españoles.

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