
El desprendimiento de retina es una afección ocular ocasionada por diferentes factores. Aunque no se puede prevenir por completo, algunos consejos pueden ayudar a cuidar la salud de los ojos y a detectar esta patología en su fase inicial para tratarla de manera más eficaz.
En este artículo te damos algunas estrategias para ayudar a prevenir el desprendimiento de retina y mantener una buena salud ocular.
¿Se puede prevenir el desprendimiento de retina?
El desprendimiento de retina es una patología que puede estar causada por factores como la edad, la genética, otras enfermedades oculares, traumatismos o cirugías oculares previas, entre otros. Por ello, no siempre se puede evitar. Sin embargo, sí se puede reducir el riesgo de padecerla acudiendo a revisiones oftalmológicas periódicas, en especial a partir de los 40 años y, con más motivo, si la persona tiene miopía o antecedentes familiares o personales de este problema.
Detectar este problema visual en su fase inicial puede ayudar a obtener mejores resultados con el tratamiento y que éste sea menos invasivo, así como a reducir la probabilidad de complicaciones y de recurrencia en el futuro.
Consejos para el cuidado ocular
A partir de los factores de riesgo que pueden causar un desprendimiento de retina, compartimos los siguientes consejos para el cuidado de los ojos:
- Prevenir traumatismos: utilizar gafas de protección siempre que haya algún riesgo de lesiones en la cabeza. Por ejemplo, por deportes de contacto o determinados trabajos.
- Seguir una alimentación equilibrada: hay algunos nutrientes que contribuyen de manera específica a mejorar la salud de los ojos, como las vitaminas A, C y E, los minerales zinc y cobre, los ácidos grasos omega-3 y los antioxidantes luteína y zeaxantina. En algunos casos, se pueden tomar como suplementos bajo supervisión médica.
- No fumar ni beber alcohol: estos dos hábitos aumentan el riesgo de sufrir enfermedades oculares, incluyendo el desprendimiento de retina.
- Realizar deporte mejora la salud en general. Además, se pueden hacer ejercicios oculares para tonificar y relajar la musculatura de los ojos.
- Evitar el estrés: el nerviosismo y las preocupaciones constantes pueden afectar a nuestra salud visual. En estas situaciones, es beneficioso realizar actividades relajantes como meditación, yoga, estiramientos, ejercicios de respiración, etc.
- No abusar del ordenador y el móvil: estar demasiado tiempo seguido ante las pantallas causa fatiga ocular y una exposición excesiva a la luz azul. Es recomendable hacer pausas cada 20 minutos, usar gafas especiales de color amarillo o filtros de protección en la pantalla (luz nocturna) y apagar los aparatos electrónicos por lo menos una hora antes de acostarse.
En síntesis, algunos buenos hábitos pueden reducir el riesgo de padecer un desprendimiento de retina. En general, llevar un estilo de vida saludable, evitar el tabaco y el alcohol, hacer ejercicio, no excedernos en las horas que pasamos delante de las pantallas y acudir a las visitas periódicas con el oftalmólogo para prevenir algunas afecciones oculares a tiempo.
