El Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas se reunieron el viernes pasado en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) para aprobar el Plan Operativo 2025-2028 de la Estrategia para el Abordaje de la Cronicidad. Este documento reconoce que, por primera vez, enfermedades como la covid persistente, el dolor crónico no oncológico, la enfermedad celíaca o la polio han de tratarse como problemas de salud crónicos dentro del Sistema Nacional de Salud.
Estas enfermedades no figuraban en la estrategia original del año 2012. Por ello, ante el creciente impacto de la cronicidad en las personas, los servicios sanitarios y la sostenibilidad del sistema, se han introducido esta serie de enfermedades con la finalidad de que el sistema sanitario establezca unas rutas asistenciales específicas y protocolos de seguimiento multidisciplinar para estos pacientes.
Hasta ahora, muchas de estas patologías permanecían en un limbo asistencial, sin una atención homogénea ni recursos adecuados. El nuevo enfoque reforzará el papel de la Atención Primaria y permitirá una mejor coordinación con servicios sociales y educativos, cuando sea necesario.
La ministra de Sanidad, Mónica García, ha anunciado este martes en X la medida: "Aprobamos reconocer como enfermedades crónicas: celiaquía, COVID persistente, dolor crónico no oncológico y secuelas de polio. Un consenso con todas las CCAA, que deberán activar rutas asistenciales y seguimiento multidisciplinar para garantizar cuidados y derechos".
Aprobamos reconocer como enfermedades crónicas: celiaquía, COVID persistente, dolor crónico no oncológico y secuelas de polio. Un consenso con todas las CCAA, que deberán activar rutas asistenciales y seguimiento multidisciplinar para garantizar cuidados y derechos.
— Mónica García (@Monica_Garcia_G) July 8, 2025
La covid persistente, una dolencia que sufren millones de personas
La covid persistente ha merecido una especial atención en este plan. Esta dolencia se caracteriza por síntomas prolongados tras la infección, como fatiga extrema, niebla mental o disfunción respiratoria.
Esta enfermedad afecta a unos dos millones de españoles que aún arrastran las secuelas de la enfermedad sistémica. Según la Red Española de Investigación de Covid Persistente (Reicop), de cada 100 casos de la enfermedad, entre 10 y 15 personas sufren o han llegado a sufrir la patología. El acuerdo garantizará una respuesta "adaptada, integral y basada en la evidencia" a las personas que la padezcan.
También se beneficiarán del plan los pacientes de dolor crónico no oncológico, que afecta a unos ocho millones de personas en España, en su mayoría mujeres. Se promoverán tratamientos seguros y eficaces, con menos dependencia de analgésicos, especialmente opioides.
Por otro lado, se reconocen por primera vez las secuelas de la polio y el síndrome pospolio, y se prevé fortalecer la atención a estos pacientes, muchos de ellos con necesidades funcionales complejas.
La enfermedad celíaca, todavía sin subvenciones
En el caso de la enfermedad celíaca, que afecta a entre el 1% y el 2% de la población, el único tratamiento eficaz es seguir de por vida una dieta estricta sin gluten. Aunque el diagnóstico y el seguimiento médico –incluidos especialistas, pruebas o análisis– están cubiertos por el Sistema Nacional de Salud, los productos sin gluten no están subvencionados, a diferencia de lo que ocurre en países como Italia o el Reino Unido.
Por el momento, el Ministerio de Sanidad no contempla ninguna medida en este sentido –aparte del reconocimiento de la cronicidad de la enfermedad– aunque sí lo hace la oposición. El pasado martes 20 de mayo, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, anunció en el Fórum Europa que su formación ha registrado en el Congreso una proposición de ley para "apoyar" a las personas celíacas con una deducción en el IRPF de hasta 600 euros por cada miembro de la unidad familiar diagnosticado con la enfermedad.