Donald Trump regresa a la Casa Blanca como 47º Presidente de EEUU. El candidato republicano ha ganado las elecciones y afrontará su segundo mandato. Para la victoria ha sido crucial el apoyo de votantes que tradicionalmente se le resistía a al partido Republicano: el de los latinos o hispanos. El voto ha aumentado en 13 puntos, hasta alcanzar el 45% de ese electorado, por encima del récord obtenido por George W. Bush en 2004.
Su rival electoral, Kamala Harris, intentó usar a su favor el desafortunado comentario del humorista Tony Hinchcliffe que acompañaba a Trump en Nueva York, que dijo que Puerto Rico era "una isla de basura flotante". Pero los esfuerzos de los demócratas fueron infructuosos y Trump atrajo a una mayoría de hispanos nunca antes vista.
Trump ha demostrado conocerlos mejor que el partido rival, como demostró en un mitin celebrado en Albuquerque, en el estado fronterizo de Nuevo México. "Los trato mejor que los demócratas", les dijo, mientras les lanzaba una pregunta: "En la costa Este prefieren que les llamen hispanos, ¿saben esto? En la costa oeste prefieren que les llamen latinos. ¿Ustedes qué prefieren?" La respuesta fue unánime: "hispanos". Un momento de la campaña de esos que pasarán a la historia.

