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El estudio DreamWorks estrena una tierna y conmovedora película sobre la adolescencia y el saber aceptar el legado de uno mismo.

Crítica de 'Ruby: aventuras de una Kraken adolescente', el monstruo que llevamos dentro

El estudio DreamWorks estrena una tierna y conmovedora película sobre la adolescencia y el saber aceptar el legado de uno mismo.

La última película de DreamWorks, estudio creado en origen por Steven Spielberg, nos adentra en la adolescencia más monstruosa con Ruby: aventuras de una kraken adolescente. Ruby Gillman tiene 16 años y sólo pretende encajar en el siempre difícil micromundo del instituto. En Oceanside High Ruby ella cree que invisible pero el chico del que está enamorada y al que ayuda con las matemáticas la admira por su facilidad con la asignatura.

El gran problema de Ruby es su secreto familiar, no son humanos. La familia de Ruby son unos kraken, seres monstruosos a los que la humanidad culpa desde tifones al hundimiento de los barcos. La familia de Ruby se instaló en la costa de EEUU y cuando empiezan a levantar sospechas se excusan con que son canadienses.

La sobreprotectora madre de Ruby le tiene terminantemente prohibido meterse en la playa, ya que el kraken que lleva dentro saldría a la luz, eso hace que la adolescente no pueda juntarse con el grupo de los guays del instituto que siempre pasan tiempo en la playa.

Como todo adolescente, Ruby se saltará las normas e irá a la playa y descubrirá que no es una kraken cualquiera, sino que desciende de las grandes reinas guerreras de los Kraken y que está destinada a heredar el trono de su imponente abuela (en la versión original de pone la voz la oscarizada Jane Fonda), la Reina Guerrera de los Siete Mares. Esta tímida adolescente descubre así que forma parte de la legendaria realeza de los míticos kraken, los señores del mar, y que su destino en las profundidades del océano es mucho mayor de lo que jamás había soñado.

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Ruby: aventuras de una kraken adolescente nos sumerge en la siempre difícil adolescencia de una forma curiosa, poniendo al joven en el lugar del monstruo y teniendo que demostrar que las apariencias pueden engañar, aquello que decía la canción de la película de animación La Bella y la Bestia de Disney de "la belleza está en el interior".

La película de DreamWorks es una comedia conmovedora y tierna llena de acción ya que Ruby descubrirá también que los Kraken juraron defender los mares de las engreídas y ambiciosas sirenas, una lucha que empezó hace miles de años.

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