Kevin Costner jura que "encontrará la manera" de finalizar su ansiado proyecto Horizon, una saga de cuatro películas de las cuales este verano se estrenó la primera con discretos resultados en taquilla. Cuatro costosos westerns autofinanciados en gran medida por Costner, que tuvo que reorganizar sus finanzas y rehipotecar su casa para afrontar el rodaje de las dos primeras películas.
Durante su estreno el pasado agosto, Horizon cosechó unos resultados de taquilla más bien flojos, provocando que la distribuidora Warner aplazara "sine die" el estreno de la segunda entrega, ya rodada y prevista solo para unas semanas después.
Costner, sin embargo, no ceja en su experimento. El actor, que abandonó la exitosa serie Yellowstone para afrontar el calendario de rodaje de sus películas, dirigidas y protagonizadas por él, aseguró en un encuentro organizado por Deadline estar "esperando, soñando. Estoy encontrándome con todos los multimillonarios de los que todos escuchamos, todos se esconden en las sombras", dijo, con la esperanza de encontrar fondos para las dos películas que restan.
Sin especificar más, prometió que "voy a hacer la tercera", mostrándose seguro y decidido de que "No sé cómo voy a hacerla, pero voy a hacerla". "La voy a hacer y después haré la cuarta. Y si queréis que diga "fin" entonces, entonces será el final".
Abundando en una comparación con avistamientos extraterrestres, dijo que es "mi propio OVNI". "Lo he visto, y no lo voy a olvidar, y lo perseguiré tanto como pueda. Encontraré la manera de estrenar la tres y la cuatro, porque ya habréis visto la uno y la dos, y vamos a ir al Oeste todos".
El presupuesto total de los cuatro films, sumando los dos ya realizados, rondaría los 200 millones. Costner llegó a hipotecar su propia casa, algo que parece ser habría causado su divorcio de Christine Baumgartner en septiembre del año pasado. Todo ello en un momento doblemente arriesgado para la distribución cinematográfica, y más de géneros añejos y tradicionales como el western.