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Jess Lourey, experta en 'true crime': "Escribo para dar sentido a todo lo que viví"

La escritora estadounidense publica El silencio del bosque, un inquietante thriller inspirado en un suceso real.

La escritora estadounidense publica El silencio del bosque, un inquietante thriller inspirado en un suceso real.
Jess Lourey, escritora estadounidense. | Wikipedia

La escritora Jess Lourey pasó su infancia en St. Cloud, una pequeña ciudad del estado de Minnesota que sufrió la actividad criminal de tres asesinos en serie a la vez. Esa pavorosa experiencia, ese miedo que compartió con su entorno, la impulsó a escribir Las chicas de la cantera (Principal Noir), un éxito en Estados Unidos con el que se ganó la etiqueta de "reina del true crime" y obtuvo el International Thriller Award, Anthony Award y Minnesota Book Award. "Parecía que los crímenes me iban siguiendo y creo que escribo para dar sentido a todo lo que viví", explica la escritora a Libertad Digital.

Después se mudó a una localidad de tan solo dos mil habitantes, en la que también se trataba de dar caza a un criminal. "Era un hombre que secuestraba niños, abusaba de ellos y después los devolvía. Les pasó a niños de mi propio colegio. Volvían muy cambiados y no volvían a ser los mismos. Mi generación creció con ese miedo", recuerda. "Primero traté de darle sentido a esas experiencias, después quise dar voz a las víctimas. Cuando ocurre un crimen, la comunidad puede quedarse hecha pedazos, como la mía, o hacerse una piña y fortalecerse. Para que esto segundo pueda pasar, hay que hablar de estos crímenes", dice.

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Aprovechando que visita España para documentarse para una futura novela, hablamos con Jess Lourey del libro que acaba de publicar, El silencio del bosque (Principal Noir), que nace de un suceso real, la desaparición de dos niñas en un bosque. La resolución del caso es ficticia. "Es el villano más terrorífico que he escrito, lo he pasado bastante mal", reconoce. "Antes, la novela negra y los libros basados en crímenes reales eran casi considerados de mal gusto. La ficción criminal muestra lo peor de la condición humana y, en otros casos, lo mejor. Podemos aprender mucho del ser humano a través de este tipo de ficción", reivindica.

"EEUU es un país bastante violento porque hay poco sentido de la comunidad. Es fácil que una persona que se sienta marginada acabe convertido en un criminal. Llevo ocho días en Valencia y ya he podido ver lo diferentes que son los dos países. En España hay más sentido de la comunidad, las familias pasan más tiempo juntas, comen y se ven más, y es más difícil sentirse solo. Este tipo de soledad, que en EEUU es más común, hace que la oscuridad pueda crecer más rápidamente. El hecho de que en EEUU haya tantas armas también es un factor muy importante", opina la escritora.

La trama de El silencio del bosque nos lleva al verano de 1980, cuando tres niñas - de ocho y cinco años- entran a un bosque de Minnesota y solo una regresa, muda y sin recuerdos. Cuatro décadas después, la detective Evangeline Reed y el científico forense Harry Steinbeck encuentran el cuerpo de una mujer a la que enterraron viva. En sus manos tiene un collar que pertenecía a una de las niñas desaparecidas cuarenta años antes. Para ser precisa con los detalles internos de la investigación, la autora ha pasado bastantes horas junto a expertos de organismos dedicadas a la resolución de casos que quedaron abiertos en Minnesota. "Empatizo mucho con las familias que sufren un caso sin resolver. Hay que reabrir periódicamente esos asesinatos porque las tecnologías avanzan y lo que antes no se podía resolver, quizás ahora sí. Intentar descubrir a los criminales es esencial para las familias de las víctimas", asegura.

Lourey entiende la fascinación que despiertan los programas de televisión, podcast, series y libros de true crime. "Los casos en los que hay extrema violencia o niños involucrados se acaban adueñando de la imaginación del público. Pienso que todo el interés que se genera en torno a un crimen es bueno mientras no se haya resuelto el caso. Una vez cerrado, entramos en un dilema ético porque los supervivientes o las familias quieren volver a sus vidas y con tanta atención es muy difícil. La organización real de Minnesota que aparece en el libro ha sacado una baraja con 52 cartas y cada una de ellas es un caso sin resolver. No es por morbo, sino para implicar a los ciudadanos y que no se vaya de la mente de las personas. Es bueno hablar de los casos no resueltos".

Además, piensa que conocer estos sucesos "nos ha vuelto más cautelosos". "En Estados Unidos los crímenes violentos están bajando drásticamente, pero la cobertura mediática está subiendo mucho. Tenemos miedo. Yo fui una niña de los 70 que creció estando todo el día en la calle y hoy en día no dejaría que mis hijos estuvieran solos. Hay motivos por los que nos hemos vuelto más cautelosos, pero por el camino hemos perdido esa libertad".

Narrador no fiable

El hecho de que uno de los personajes de El silencio del bosque, la única superviviente de aquella misteriosa desaparición, no tenga memoria la convierte en un narrador no fiable, que, para Lourey, permite que "el lector se involucre mucho más en la historia" como "consiguió Gillian Flynn en la novela Perdida". Durante la resolución del caso, el lector conocerá el pasado de Evangeline, una dura infancia a la que regresa involuntariamente. "Para una mujer que ha crecido sintiendo que no tiene ningún poder, ser capaz de ayudar a otras personas al resolver crímenes le hace curar sus propias heridas y recuperarse de ese trauma", adelanta la autora estadounidense.

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Jess Lourey, escritora estadounidense. | Principal de Libros

No ha querido abusar de la "intuición del investigador" porque considera que puede causar rechazo en el lector. Sin embargo, cree que es muy interesante, que es una cualidad muy importante para un detective y que todas las personas las poseemos. Apostó por un equilibrio entre los dos detectives. "Evangeline aporta la parte intuitiva y Harry es más científico".

"Mis historias son bastante locales - comenta Jess Lourey - ambientadas en pequeñas ciudades de Minnesota, un estado que no es demasiado conocido de EEUU, pero creo que hay elementos universales. Hemos crecido escuchando cuentos de hadas y bosques, Caperucita Roja, Cenicienta…Me preocupa ese cierto localismo que hay en mis libros, pero como autora, si consigo dar autenticidad a la ambientación, creo que el lector me acompañará".

Jess Lourey. El silencio del bosque. Traducción: Iris Mogollón. Principal Noir. PVP: 21,95 € Páginas: 336 pp. ISBN: 978-84-10424-19-7

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