El día 1 de julio estaba marcado en rojo en el calendario de la Fuerzas Armadas. Es el día en el que de forma oficial el Ejército español toma el mando del batallón multinacional de la OTAN desplegado en Eslovaquia. Una de las múltiples posiciones que conforman el muro anti-Rusia que la Alianza Atlántica ha diseñado para que Moscú se lo piense mucho antes de invadir otro país europeo a imagen y semejanza de lo ocurrido en Ucrania.
De facto, los mandos militares españoles empezaron a tomar el control desde que se desplegó el grueso del contingente hace un par de meses. Y es que como país líder, es el que más número de efectivos aporta a este despliegue aliado. Será también el mayor destacamento español en la Europa del Este. Pero oficialmente no se ha tomado hasta la ceremonia que ha tenido lugar este lunes en Lest, donde está desplegado todo el Batallón Multinacional.
Las Fuerzas Armadas españolas tienen desplegadas en estos momentos 770 efectivos y casi 300 vehículos en Eslovaquia. Un despliegue bajo mando del coronel Andrés González Alvarado, jefe del Regimiento Isabel la Católica número 29, que pertenece a la Brigada Galicia VII (BRILAT). Precisamente, esta unidad y la Brigada Paracaidista (BRIPAC) aportan el grueso de la fuerza española.
Junto a ellos también hay militares de la brigada logística, de los regimientos de transmisiones, guerra electrónica e inteligencia, así como del Cuartel General Terrestre de Alta Disponibilidad de Bétera (Valencia). En un futuro la fuerza se incrementará aún más, ya que está previsto que para finales de año se una un centenar de efectivos que acompañarán a tres helicópteros de ataque Tigre y a dos helicópteros polivalentes NH-90.
Entre las capacidades que aportan las Fuerzas Armadas españolas están vehículos blindados URO VAMTAC (Alta Movilidad Táctica), VERT (Vehículo de Exploración y Reconocimiento Terrestre), cazacarros Centauro y obuses ligeros Light Gun 105/37 (estos sistemas se estrenan en un despliegue internacional) además de lanzamisiles Mistral.
Las fuerzas españolas no están solas en Eslovaquia. También contribuirán militarmente otros países como la República Checa, Portugal, Eslovenia o la propia Eslovaquia, hasta elevar la cifra de efectivos del Batallón Multinacional hasta 1.100 militares. Los portugueses, por ejemplo, serán los encargados de aportar las principales unidades acorazadas, como serán los carros de combate Leopardo.
La ubicación de este Batallón anti-Rusia estará en Lest, en el centro del país, en una zona poco poblada donde el ejército eslovaco tiene un importante campo de maniobras, potenciado en la última década con importantes inversiones económicas. Hasta estos últimos días se han estado realizando maniobras de interoperatividad entre las fuerzas militares, algo que se continuará mientras haya despliegue aliado en Eslovaquia.