
El Gobierno va a lanzar un "plan nacional de helicópteros" para dotar de nuevas aeronaves de ala rotatoria tanto a las Fuerzas Armadas como a las Fuerzas de Seguridad y otros organismos públicos. Así quedó acordado durante el encuentro que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el consejero delegado de Airbus, Guillaume Faury, mantuvieron durante la jornada de ayer martes en el Palacio de la Moncloa. Una cita en la que estuvo la ministra de Defensa, Margarita Robles.
Este nuevo acuerdo incluye la adquisición de helicópteros NH90, H-145M y H-160, así como otros posibles modelos que no han sido detallados. En el documento hecho público de forma conjunta tanto por el Ejecutivo como por la multinacional europea no detalla en ningún momento datos relevantes como el número de unidades de cada tipo de helicópteros, ni los plazos de entrega, ni el montante económico final de la operación.
Si explica que este plan "permitiría a Airbus realizar las inversiones necesarias en España, para reforzar su huella industrial y en particular de sus instalaciones en Albacete, y del ecosistema de empresas que participan en el sector aeronáutico y de defensa de nuestro país. Además de desarrollar soluciones técnicas innovadoras, se ampliará la capacidad de exportación de productos de Airbus en las regiones con las que España cuente con unas relaciones privilegiadas".
El acuerdo también incluye la participación de la multinacional europea en el futuro sistema de entrenamiento avanzado del Ejército del Aire y el Espacio, en el que parece que el turco TAI Hürjet está con ventaja: "Airbus y el Gobierno de España buscarán las condiciones necesarias para que la compañía, como fabricante de aviones e integrador de sistemas de referencia, apoye la adaptación de un nuevo avión entrenador avanzado, junto al socio designado por el Gobierno, y su sistema de entrenamiento integrado".
Éste es el segundo encuentro que el consejero delegado de Airbus mantiene con Pedro Sánchez en el Palacio de La Moncloa en los últimos años. El anterior se produjo en julio de 2020, en plena pandemia mundial de coronavirus. En aquella ocasión el Gobierno prometió a Airbus una larga lista de inversiones en Defensa para evitar despidos en las diferentes instalaciones de la compañía en nuestro país. Unas promesas que se han cumplido con los años.
Aquel encuentro supuso la puesta en marcha del programa de aviones C295 de vigilancia marítima, la trasformación de tres aviones A330 en versiones MRTT (multipropósito con reabastecimiento en vuelo), el compromiso de modernizar los helicópteros Tigre a MKIII, un programa conjunto Defensa-Interior para la adquisición de 36 helicópteros H135, la compra de cuatro helicópteros H160 para Interior, así como el compromiso de avanzar en los programas FCAS o Euromale.

