El diputado del Partido Unionista Democrático, Jim Shannon, formuló una pregunta para la ministra de Estado en el Ministerio de Defensa británica, Maria Eagle, sobre la evaluación que ha realizado sobre la evolución del nivel de los presupuestos de defensa en los últimos 10 años. La respuesta parlamentaria escrita de Eagle se produjo el 30 de junio y en ella remarcó que "el reciente aumento del gasto de defensa es el mayor aumento sostenido desde el fin de la Guerra Fría".
3% para 2030
En cuanto al futuro del gasto militar, la ministra Laborista también se pronunció. "El Gobierno se ha comprometido firmemente a aumentar el gasto en defensa hasta alcanzar el 2,6 % del PIB para 2027 y se ha fijado la ambición de alcanzar el 3 % para 2030, según lo permitan las condiciones fiscales y económicas", señaló Eagle según la información recogida por el Parlamento del Reino Unido.
Por otro lado, también hizo mención en su respuesta a la cuestión de destinar el 5% del PIB en Defensa. "El Ministerio de Defensa (MOD) también ha asumido el compromiso histórico de destinar el 5 % del PIB a la seguridad nacional. Este es un aumento generacional del gasto en defensa y seguridad, que cumple con nuestro compromiso de ser líderes en la OTAN", indicó la ministra.
Acuerdo de la OTAN en Defensa
Según lo acordado en La Haya por los miembros de la Alianza, el 5% estará compuesto por una asignación de al menos el 3,5% del PIB anual a "los recursos básicos de defensa y al cumplimiento de los Objetivos de Capacidad de la OTAN". Por otro lado, un 1,5% se destinará a "proteger nuestra infraestructura crítica, defender nuestras redes, garantizar nuestra preparación y resiliencia civil, impulsar la innovación y fortalecer nuestra base industrial de defensa", entre otras cosas.
Las declaraciones de la ministra van en consonancia con el compromiso de los miembros de la Alianza en la cumbre de La Haya que tuvo lugar el 24 y 25 de junio. En la declaración publicada en la página oficial de la OTAN (25 de junio) se señala que los Aliados "se comprometen a invertir el 5 % de su PIB anualmente en necesidades básicas de defensa, así como en gastos relacionados con la defensa y la seguridad, para 2035, a fin de garantizar nuestras obligaciones individuales y colectivas, de conformidad con el Artículo 3 del Tratado de Washington".
De igual manera, el primer ministro británico Keir Starmer ya había expresado su posición favorable ante este aumento elevado del gasto en defensa antes de la reunión en La Haya. "Debemos navegar esta era de incertidumbre radical con agilidad, velocidad y un claro sentido del interés nacional para brindar seguridad a los trabajadores y mantenerlos a salvo. Por eso me he comprometido a destinar el 5% del PIB a la seguridad nacional. Esta es una oportunidad para profundizar nuestro compromiso con la OTAN e impulsar una mayor inversión en la seguridad y la resiliencia del país en genera", señaló Starmer según la información del gobierno británico publicada el 23 de junio, un día antes de la cumbre.