L D (EFE)
Pese a admitir que decir adiós a la Copa "es un palo muy fuerte", Puyol insiste en que la eliminación puede tener alguna lectura positiva, "pero sólo si luego ganamos algún título, porque está claro que si ganamos Liga y
Champions
nadie se acordará de la Copa".
El defensa destaca "la actitud" del Barcelona y deja claro que "fue un accidente, porque nadie puede decir que no lo dimos todo o que no nos lo tomamos en serio". "Estamos dolidos", señala Puyol, "pero en el vestuario no hay dudas, ahora simplemente tenemos que olvidarnos de la Copa y centrarnos en el resto de competiciones". Sobre el partido ante el equipo de Segunda B, disputado en un campo de césped artificial, Puyol lamenta que fuese "muy difícil crear ocasiones, y a medida que pasan los minutos, el rival se va haciendo fuerte, y luego salta la sorpresa".
Sin embargo, el capitán considera que esta eliminación será menos dolorosa que la de años precedentes en circunstancias similares (hace dos temporadas, el Barcelona cayó a manos del Novelda y en la 2001-02, ante el Figueres) porque "ahora tenemos más confianza". "El equipo está fuerte, antes éramos más débiles y parecía que se acababa el mundo si nos eliminaban de la Copa, pero ahora lo podemos asimilar mejor, hay más confianza en el grupo", explica.
Tras jugar 120 minutos, el Barcelona tiene el próximo sábado, en San Mamés, otro compromiso de Liga, y el martes 2 de noviembre recibirá al Milán en el Camp Nou. Preguntado sobre si el equipo puede acusar el gasto físico de la Copa, Puyol reconoce que "se puede notar en algunos aspectos, pero no puede servir de excusa".
Titular por primera vez esta temporada, también Andrés Iniesta valora la eliminación copera. El jugador lamenta que el Barcelona "se haya quedado sin un título", pero niega que el Gramanet saliese más motivado que el equipo azulgrana. "Nosotros tuvimos buena actitud y luchamos en todo momento, pero ellos tuvieron el acierto y nosotros no", concluyó.
El defensa destaca "la actitud" del Barcelona y deja claro que "fue un accidente, porque nadie puede decir que no lo dimos todo o que no nos lo tomamos en serio". "Estamos dolidos", señala Puyol, "pero en el vestuario no hay dudas, ahora simplemente tenemos que olvidarnos de la Copa y centrarnos en el resto de competiciones". Sobre el partido ante el equipo de Segunda B, disputado en un campo de césped artificial, Puyol lamenta que fuese "muy difícil crear ocasiones, y a medida que pasan los minutos, el rival se va haciendo fuerte, y luego salta la sorpresa".
Sin embargo, el capitán considera que esta eliminación será menos dolorosa que la de años precedentes en circunstancias similares (hace dos temporadas, el Barcelona cayó a manos del Novelda y en la 2001-02, ante el Figueres) porque "ahora tenemos más confianza". "El equipo está fuerte, antes éramos más débiles y parecía que se acababa el mundo si nos eliminaban de la Copa, pero ahora lo podemos asimilar mejor, hay más confianza en el grupo", explica.
Tras jugar 120 minutos, el Barcelona tiene el próximo sábado, en San Mamés, otro compromiso de Liga, y el martes 2 de noviembre recibirá al Milán en el Camp Nou. Preguntado sobre si el equipo puede acusar el gasto físico de la Copa, Puyol reconoce que "se puede notar en algunos aspectos, pero no puede servir de excusa".
Titular por primera vez esta temporada, también Andrés Iniesta valora la eliminación copera. El jugador lamenta que el Barcelona "se haya quedado sin un título", pero niega que el Gramanet saliese más motivado que el equipo azulgrana. "Nosotros tuvimos buena actitud y luchamos en todo momento, pero ellos tuvieron el acierto y nosotros no", concluyó.