El derbi catalán se ha resulto fácilmente a favor del Barcelona Regal. El conjunto ganó sin problemas (63-78) al Joventut en Badalona en un partido que solo tuvo intensidad y emoción en el segundo cuarto y que se rompió en un tercer período en el que los locales solo anotaron dos puntos.
Los azulgranas estuvieron siempre por delante en el marcador gracias a su superioridad física, con Jawai intratable en la zona, y al acierto de Navarro y Wallace en la larga distancia. El equipo de Xavi Pascual lo tuvo muy fácil de inicio ante un rival muy pasivo en defensa (3-11, min. 4) y con pocos recursos en ataque más allá de los tiros de tres y las individualidades de Fisher.
Los visitantes lograron una diferencia de 16 puntos en el minuto 28 (40-56) ante un rival colapsado en ataque una semana después de que contra el Canarias en otro nefasto tercer cuarto anotara seis puntos.
El cuarto período fue un mero trámite. Los triples permitieron al Barça ampliar la diferencia hasta los 21 puntos (57-78) mientras que Fisher y Oliver maquillaron un resultado que hace justicia a las enormes diferencias existentes entre ambos equipos.
Pinchazo del Fuenlabrada
El Fuenlabrada volvió a perder en su pista (65-73), donde todavía no conoce la victoria, ante un rival directo como el Canarias que supo jugar siempre al ritmo necesario para conseguir el objetivo. La mala defensa local, el dominio de los rebotes por parte de Sekulic y Donaldson y el mal porcentaje de tiro lastró al Fuenlabrada hasta el punto de acabar perdiendo en el primer cuarto por 9-23.
Leo Mainoldi, uno de los faros habituales del equipo, no consiguió anotar en todo el primer cuarto, y finalmente en todo el partido, y eso tuvo sus consecuencias. Otro factor importante fue la necesidad de Alejandro Martínez de ir dando descanso a sus titulares. La ausencia de Sekulic y Richotti las notó el equipo.
El buen balance defensivo canario y su dominio del ritmo del partido acabaron por dejar sin argumentos al Fuenlabrada y otorgaron una victoria al Canarias que vale su peso en oro.
El Valencia, falto de acierto
Los levantinos intensificaron su defensa hasta el punto de dejar su casillero en cuatro puntos durante siete minutos, situación que aprovechó el Valencia para sacar su potencial colectivo e iniciar la remontada. Pero la racha positiva del Blancos de Rueda siguió creciendo, con una buena defensa y el acierto de cara al aro, y pudo recortar hasta el 61-48 al que se llegó en el tercer cuarto.
El Valencia estaba dispuesto a remontar en el tercer cuarto. A falta de dos minutos, el electrónico reflejaba un apretado 66-62, pero los vallisoletanos dieron una vuelta de tuerca más a su defensa y, merced al trabajo en bloque y la capacidad de superación, remataron a un Valencia al que le pesó demasiado su falta de acierto exterior (74-66).
Satoransky salva al Cajasol
El Cajasol, que llegaba colista en la tabla con un solo triunfo en diez partidos, ha tomado el Bilbao Arena de Miribilla de la mano de Tomas Satoransky, el mejor de su equipo y decisivo con una jugada de tres puntos a seis segundos del final. El encuentro estuvo igualado en su mayor parte y muy emocionante hasta que sonó la bocina con el definitivo 76-79.
Con la duda de si entraba o no un lanzamiento de lado a lado de la cancha de Alex Mumbrú finiquitó un choque que decantaron una canasta más tiro adicional del joven base checo (18 puntos y 18 de valoración) y un resbalón de Nikos Zisis cuando su equipo disponía de tres segundos para remontar el 76-77 que reflejaba el marcador.
Ese resbalón echó por tierra el enorme partido realizado por Mumbrú, quien unos segundo antes, a 25 del final, había vuelto a poner arriba al Bilbao Basket con su enésima jugada de tres puntos. Les salió cruz esta vez a 'los hombres de negro', que han desperdiciado la oportunidad de oro de auparse a la segunda plaza de la tabla tras la derrota del Valencia en Valladolid.