
Vistió la camiseta baskonista durante una década —desde la temporada 1985/1986 hasta el curso 1995/1996— consiguiendo una Copa del Rey en 1995, donde fue el mejor de aquella edición. Pasó por el Real Madrid, CB Cáceres, Pallacanestro Triestre (Italia), Unicaja de Málaga, CB Girona, Lleida y CB Valladolid. Nunca paró.
Colgó la camiseta en el año 2003 y como buen base y con más de 2.890 asistencias dadas en liga ACB, se pasó a los banquillos. En los bancos es donde ha hecho historia del baloncesto español. Llegó al Real Madrid tras su buen papel en el Gipuzkoa Basket y allí se convirtió en uno de los mejores entrenadores de la historia blanca, a la altura del mítico Lolo Sainz (8 Ligas, Copas del Rey, 1 Super Copa y 4 Copas Intercontinentales, entre otros títulos).
Como entrenador, en el Real Madrid ha conseguido 6 títulos de Liga, 6 Copas del Rey, 7 Supercopas de España y 2 Euroligas —20 años después de la última—. Su caché rozaba el cielo cuando todo se torció. En semifinales de Liga ACB de la temporada 2021/22, entre el segundo y tercer partido contra el propio Baskonia, sufrió un infarto de miocardio y tuvo que ser sometido a un cateterismo. En ese momento Chus Mateo, segundo de Laso en aquel momento, se hizo cargo del equipo en lo que quedaba de temporada, y no hubo vuelta atrás. El Real Madrid, decidió prescindir de los servicios del vitoriano para colocar a Chus Mateo de primer entrenador blanco, alguien que, por otra parte, ha demostrado que vale para el puesto.
Pablo se tomó un año para descansar, desde 1985 no había parado. Más de 30 años de baloncesto profesional sin descansos de más de tres meses. Apareció la oportunidad de volver a entrenar, en Múnich, un año después. Allí que fue. En Alemania ha conseguido ganar la Liga y la Copa.
Pero cuando te llama el hogar... Es difícil decirle que no. El que vistió la camiseta baskonista en 370 ocasiones, dio 1951 asistencias y fuese héroe de la primera Copa del Rey del club vitoriano, será entrenador del club que lo vio nacer para las próximas 3 temporadas, hasta 2027. Ahora, lo único que deberían hacer Saski Baskonia es escuchar y dejar trabajar a uno de los mejores entrenadores de la historia de nuestro país.
