Los jugadores del Real Madrid festejaron por todo lo alto en el vestuario del Vicente Calderón el pase a la final de Champions tras eliminar al Atlético.
Benzema se marchó de tres jugadores del Atlético de Madrid (Giménez, Savic y Godín) en la jugada que originó el 2-1, obra de Isco, para despertar a los colchoneros del sueño de la remontada.