El fichaje de Cristiano Ronaldo por el Al-Nassr ha sido el primer paso de Arabia Saudí para convertirse en la liga no europea más importante del mundo. El siguiente paso es todavía más ambicioso: convencer a Leo Messi de que fiche por el Al-Hilal o el Al-Ittihad, los principales rivales del club del portugués. Según informa el diario Marca, la propuesta económica es estratosférica y le ofrecen bastante más dinero que al luso: 350 millones de euros por temporada.
La transformación de Arabia Saudí en el mundo del deporte comenzó hace varios años con la adquisición de la Supercopa de España de fútbol. El Gran Premio de la Fórmula 1 y las inversiones en equipos como Aston Martin y McLaren son un indicador de que la apuesta del país por el deporte es una realidad. De hecho, el Gobierno ya trabaja en trasladar en el futuro las escuderías de F1, entre ellas la de Fernando Alonso, a la ciudad de Neom. El fichaje de Cristiano Ronaldo ha sido el bombazo del mercado invernal, pero los árabes quieren más.
El fichaje de Leo Messi sería la guinda del pastel, y es que volver a juntar a los dos jugadores que han dominados los últimos años el mundo del fútbol convertiría a la liga árabe en el escaparate perfecto con vistas a conseguir la organización del Mundial 2030 o 2034.
La oferta que preparan en Oriente Medio es de dimensiones astronómicas: 350 ‘kilos’ por temporada para un Messi que todavía no ha renovado con el PSG, y cuyo contrato finaliza en junio de 2023.
La ambición del país musulmán va más allá incluso, y es que durante las últimas semanas se ha especulado con varios nombres más: Sergio Ramos, Sergio Busquets, Luka Modric y Ángel Di María son otras de las opciones que manejan los clubes locales para reforzar a sus equipos. Hasta el nombre de Luis Enrique ha sonado para ocupar alguno de los banquillos de una liga que quiere revolucionar el mundo del fútbol a base de talonario.