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El gran problema que afecta tanto a Real Madrid como a Barcelona y la amarga queja de De Bruyne

La carga de partidos se ha convertido en un verdadero problema. La plaga de lesiones deja tocados a Madrid y Barça.

La carga de partidos se ha convertido en un verdadero problema. La plaga de lesiones deja tocados a Madrid y Barça.
De Bruyne no se muerde la lengua | Cordon Press

Los que se encargan de hacer el calendario se han coronado esta temporada. Entre la UEFA y LaLiga han firmado un calendario terrorífico con una carga de partidos brutal que está teniendo consecuencias nefastas: plaga de lesiones que se multiplica temporada a temporada. La plaga de lesiones está teniendo ya sus consecuencias entre los grandes equipos desde principio de temporada.

Los señores trajeados que lo más redondo que han visto en su vida es una lavadora comienzan a quedar retratados. Las múltiples lesiones que están sufriendo tanto el F.C. Barcelona como el Real Madrid pone aún más en la lupa el exceso de partidos. Hansi Flick cuenta con hasta ocho jugadores lesionados -Fermín, Marc Bernal, Christensen, Ansu Fati, Araujo, De Jong, Gavi, Héctor Fort- que hacen complicado poder competir a estas alturas de la temporada. El Real Madrid, su eterno rival, tampoco se queda atrás con Ancelotti lamentando la reciente lesión de Militao tras el parón de selecciones.

Los preparadores físicos tienen claro que esta plaga de lesiones tiene mucho que ver con dos cuestiones: la carga de partidos, incomprensible en el inicio de campaña, y las pretemporadas en las que se pasa más tiempo en los aeropuertos que en los campos. Lo único que se consigue recargando tanto el calendario es que se vean partidos con mucho menos espectáculo y además se pone en riesgo la salud de los verdaderos protagonistas de este deporte, los jugadores.

Kevin de Bruyne ha puesto el grito en el cielo ante una temporada en la que se incrementa aún más el número de partidos al debutar el famoso Mundial de Clubes.

El centrocampista del City analiza el problema de la acumulación: "En mi primera pretemporada tuve 25 días para preparar el primer partido contra el Skonto de Riga. Ahora te dan 4 días. Y al final mira cuantos cruzados... Te hacen ir a Asia, Estados Unidos, partidos fortísimos, derbis, partidos grandes, la gente cae. Y sigue cayendo y seguirá cayendo".

El belga considera que el Mundial de Clubes es una auténtica temeridad: "Creo que el problema vendrá cuando hayamos terminado la competición. Sabemos que solamente habrá tres semanas entre la final de la competición y la primera jornada de la Premier League. Tienes tres semanas para tomarte tus vacaciones y hacer la preparación para jugar 80 partidos la temporada siguiente", se ha aventurado.

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