
Carlo Ancelotti vive una nueva etapa de su carrera en Brasil. El técnico italiano ha escrito la biografía de su carrera en el mundo del fútbol en un libro titulado El sueño: cómo ganar la Champions League que saldrá a la luz a partir del próximo 1 de octubre.
Ancelotti da un amplio repaso a su carrera en las 320 páginas que componen la biografía, su etapa como jugador y entrenador del Milan (seis capítulos) y del Real Madrid (cinco capítulos).
Toda su carrera como jugador y como entrenador tiene sus propios capítulos donde se aprecia que Ancelotti tiene grandes recuerdos, pero hay una excepción: su paso como entrenador por el Bayern Múnich, donde vivió momentos muy complicados a pesar de ganar una Bundesliga y dos Supercopas de Alemania con el conjunto bávaro.
Así describe la decepción que se llevó con los dirigentes del Bayern: "Dejamos atrás a la competencia en la Bundesliga, terminando con quince puntos de ventaja, cinco más de los que Pep (Guardiola) había logrado con el segundo clasificado en los dos años anteriores. Sin embargo, el Bayern no lo consideró un éxito. Era lo mínimo que esperaban", comienza diciendo un Ancelotti al que sorprendió la atmosfera enrarecida que vivió en el vestuario del conjunto germano: "Lo completamente nuevo para mí era trabajar en un club que no se regía por los caprichos de un único y carismático dueño. En cambio, había un grupo diverso, uno que representaba a los clubes tradicionales y legendarios, con jugadores de leyenda", describe el técnico.
A mitad de temporada se produjo un cambio de presidente cuando Uli Hoeness asumió el cargo. Rummenigge era el presidente de la junta directiva así que "era responsable ante varias personas a la vez. Me costaba decidir quién tenía más poder, y después de unas semanas, incluso llamé aparte a Philipp Lahm para pedirle su opinión. Pero, como siempre, hice todo lo posible por mantener mi independencia", cuenta Ancelotti.
Ancelotti revela un bombazo. El día que recibió órdenes de arriba para implementar más disciplina en su plantel: "Me entregaron una lista con cinco puntos que debería leerles". Este hecho dejó totalmente descolocado a un Ancelotti que jamás había vivido algo así: "Me puse delante del equipo en el vestuario, saqué la hoja de papel del bolsillo y dije: Tengo órdenes de la directiva de leerles esta lista. Esa fue mi forma de distanciarme de esa tarea".
Su salida del Bayern aún le escuece. Todo se remonta al 27 de septiembre de 2017, el Bayern se enfrentó al PSG en la segunda jornada de la fase de grupos de la Champions League. Fueron vapuleados por 3-0, una derrota histórica, ya que fue la más abultada del cuadro alemán en la competición en 21 años.
Karl-Heinz Rummenigge anunció esa misma noche de manera rotunda que habría consecuencias. "Pienso que lo que hemos visto esta noche no fue el Bayern Múnich. Es importante que después de este partido pasemos página rápidamente y volvamos a ser el Bayern. Fue una derrota sobre la que hay que hablar. Hay que ser aplicados en el análisis. Tenemos que hablar claro y sacar conclusiones".
Fue un trance que le demostró al italiano que "no hace falta un presidente errático o un propietario impredecible para que te echen. Los accionistas de una empresa también pueden hacerlo". Ancelotti, al que despidieron en su día de Juventus, Chelsea o Real Madrid, recuerda su final del Bayern como "el despido más despiadado de toda mi carrera".
